Javier Fernández Lasquetty desliza a su entorno su “humillación” con el ascenso de Ossorio

El actual Consejero de Economía, Hacienda y Empleo se siente completamente “humillado” ante una de las últimas decisiones de Isabel Díaz Ayuso. En concreto, la decisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid de nombrar a Enrique Ossorio como el vicepresidente de la Comunidad. Un cargo que, según fuentes cercanas al consejero, Lasquetty esperaba conseguir.

Si algo ha demostrado Isabel Díaz Ayuso, es estar dispuesta a gestionar su liderazgo según sus “propias normas”. Algo que se ha podido comprobar en el Gobierno de la Comunidad de Madrid y ahora, también en la dirección del partido a nivel regional. Un planteamiento con el que la presidenta popular busca “premiar” a aquellos que representan una nueva “imagen” del Partido Popular, así como a aquellos que le han sido leales durante los conflictos internos del partido.

Estrategia que ha llevado a Isabel Díaz Ayuso a nombrar a gente joven, del calibre de Noelia Núñez, como candidata en las municipales de Fuenlabrada. Misma estrategia que, ahora, coloca a Enrique Ossorio como nuevo vicepresidente de la Comunidad de Madrid, encargado de coordinar el Gobierno regional y tomar el mando “los próximos diez o quince años”.

BUENAS PALABRAS HACIA ENRIQUE OSSORIO

“Madrid está viviendo un momento excepcional” destacaba la presidenta de la Comunidad de Madrid. Unas palabras que acompañaban al anuncio sobre el nuevo cargo de Enrique Ossorio, asegurando que este cambio se produce debido a la necesidad de mantener “que el crecimiento de Madrid sea sostenible y llegue a todos los rincones de la Comunidad”.

“Es fundamental no improvisar medidas, ni un programa cortoplacista” ha señalado Ayuso. Una tarea que a partir de ahora recaerá en Enrique Ossorio, quien será el “sustituto” de la presidenta, así como su suplente, en casos de ausencia o enfermedad. Un cargo que muestra la absoluta confianza de Isabel Ayuso en el Consejero de Educación para crear una estrategia a largo plazo, de cara a los próximos 15 años de la capital española.

Un plan que no supondrá un gran desafío para Ossorio. Y es que el actual consejero es conocido por ser uno de los altos cargos más “experimentados” de la Comunidad de Madrid. Así pues, desde 1992, ha sido uno de los altos cargos en la Comunidad de Madrid, como consejero de Economía y Hacienda, viceconsejero y director general.

LASQUETTY, “HUMILLADO” ANTE LA DECISIÓN DE ISABEL AYUSO

Sin embargo, no todos parecen “aplaudir” la decisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Y es que, a pesar de la gran trayectoria de Ossorio en Madrid, lo cierto es que el codiciado puesto ha creado cierto malestar.

En concreto, al Consejero de Hacienda de la Comunidad de Madrid desde agosto de 2019, Javier Fernández Lasquetty y Blanc. Y es que, tal y como ha podido saber este diario, el consejero esperaba ser él mismo el que recibiera este puesto de confianza por parte de Isabel Ayuso.

Tanto es así, que fuentes del entorno de Lasquetty han asegurado a este diario que el consejero se siente “humillado” por el ascenso de Ossorio como nuevo vicepresidente de la Comunidad de Madrid. Un puesto que, sin duda, le dará un poder muy superior al que actualmente ostenta Lasquetty.

Un nombramiento que, desde luego, ha sido una decepción y “humillación” para el consejero. Y es que poco o nada se le puede reclamar a Lasquetty desde su llegada a la Consejería de Hacienda en agosto de 2019, teniendo como misión esencial la política fiscal de equilibrio presupuestario y reducción de impuestos de la Comunidad de Madrid.

Una tarea que ha sido “esencial” para la estrategia política de Ayuso. Algo que, sin duda, fomentaba las esperanzas de Lasquetty de ser el vicepresidente de la popular en Madrid. Sin embargo, su historial al lado de Pablo Casado podría haber sido un punto clave en la elección de Ossorio. Y es que es imposible olvidar que Lasquetty fue, durante los primeros meses de 2019, el jefe de gabinete del ahora ex presidente del Partido Popular, Pablo Casado. Algo que Isabel Ayuso podría no haberle perdonado aún. Al menos, en cuestión de confianza para nombrarle su mano derecha en la Comunidad de Madrid.