Empieza a agrietarse el mantra de los coches ‘B’ en el Distrito Centro con una moratoria a las mercancías

El alcalde Almeida ha sido finalmente sensible a las reivindicaciones del sector del transporte de mercancías y va a permitir que los camiones con distintivo ambiental B puedan circular por la zona de bajas emisiones del Distrito Centro. Es la primera grieta en su mandato en el monolítico cierre de esta zona, heredado de Carmena, abolido por la Justicia y vuelta a edificar por la nueva ordenanza medioambiental. Vox lo celebra, la izquierda lo condena y son PP y Ciudadanos quienes han arbitrado la solución aun problema que podía colapsar el ya de por sí delicado transporte de mercancías en la zona centro.

No es que la empresas ni el Ayuntamiento no se tomen en serio las bajas emisiones en la zona centro, hoy Distrito Central, antes Madrid Central. Varios proyectos promueven una red de distribución de emisiones cero, pero los transportistas llevaban meses haciendo notar que pensar en una distribución total con vehículos C, ECO o Cero emisiones era una utopía. La nueva Ordenanza medioambiental decretaba que los vehículos con etiqueta tenían ya vedado el acceso a una de las zonas más importantes del comercio madrileño, ni más ni menos que la gran extensión del Distrito Centro.

ACUERDO DE PP Y CIUDADANOS

El acuerdo, firmado por los grupos municipales del PP y Ciudadanos, se elevará a Pleno en las próximas fechas, para su aprobación definitiva. Se trata de una moratoria para que los vehículos ligeros de mercancías con clasificación ambiental B puedan continuar accediendo a la Zona de Especial Protección Distrito Centro hasta el 31 de diciembre de 2023.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, lo ha anunciado tras reunirse en el Palacio de Cibeles con el sector de mercancías del Comité Madrileño de Transporte por Carretera.
PP y Cs han firmado una enmienda a la ordenanza de movilidad para modificar esa disposición transitoria con el objetivo de que “no se vean afectados los transportistas por las restricciones de acceso al Centro”. El Gobierno municipal se ha guiado, ha continuado Almeida, “por la difícil situación económica” y por “los mejores datos de calidad del aire”. “No podemos trasladar más cargas y gravámenes”, ha señalado.
El Comité Madrileño de Transporte por Carretera, CMTC, ha mostrado su satisfacción por la aprobación de esta moratoria hasta el 31 de diciembre de 2023. Así lo han trasladado al alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y al delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.

EL 60% DE LA FLOTA, FUERA

Con la normativa en vigor, este tipo de vehículos tendría el acceso restringido a Centro desde el 1 de enero de 2023, lo que implicaría que el “60% de la actual flota no puede acceder, y ello puede conllevar un grave problema de abastecimiento”.
Para el sector del transporte de mercancías por carretera de la Comunidad de Madrid, se trata de “un logro obtenido con diálogo, consenso y mucha insistencia, ya que a lo largo de todo este año se han mantenido contactos y reuniones con los diferentes grupos municipales”.
Queda por ver la situación de los vehículos de mudanzas, así como la del resto de vehículos pesados con distintivo ambiental A “para que en determinadas situaciones específicas puedan seguir ejerciendo su actividad”, aseguran los representantes de los Transportistas.
Voz ha manifestado su conformidad con la decisión del alcalde. Otro caso es el de la izquierda, que está radicalmente en contra a cualquier relajación de las reglas medioambientales. “Gana la economía a la salud”, ha dicho con laconismo la portavoz socialista, Mar Espinar.