La historia que hay detrás del famoso neón de Schweppes de la Gran Vía

Las bodas de oro han llegado para uno de los emblemas más reconocidos de la capital madrileña. Se trata del popular neón de Schweppes situado en el edificio Capitol de la Gran Vía. Desde un emplazamiento privilegiado y siendo testigo de la infinidad de acontecimientos que han tenido lugar en esta céntrica avenida, el cartel luminoso está de celebración.

En el año 1972 los madrileños pudieron ver por primera vez el famoso cartel publicitario de la marca de bebidas. Un cartel que este pasado 5 de agosto celebraba, nada más ni nada menos que su 50 aniversario oficial en Madrid. El cumpleaños de este símbolo característico de la ciudad que no pasa desapercibido para nadie. Y es que, se encuentra a casi 40 metro de altura respecto al suelo y está integrado por cien luces led que permiten que se vea bien incluso desde la distancia.

Luisa Álvarez fue la artistas encargada de llevar a cabo de manera completamente artesanal el popular emblema de Schweppes, logrando el equilibrio perfecto entre metal, vidrio, luz y color. El cartel combina tres técnicas de iluminación: bombillas incandescentes, neón y retroiluminado, algo que hace cinco décadas hizo que el cartel fuese único y especial.

Tras este cartel situado en uno de los edificios mejor situados de la capital madrileña se encuentran dos suites del hotel Vincci Capitol. Habitaciones privilegiadas en las que se puede disfrutar de unas vistas únicas a la Gran Vía y cuyo precio puede ascender a los cien euros.

A pesar de que las mencionadas habitaciones no cuentan con los mismos años de historia que el cartel, puesto que fueron abiertas al público en el año 2007, es difícil conseguir hueco en una de ellas ya que son de las suites más codiciadas de todo Madrid.

No obstante, el edificio en el cual se encuentra el cartel de Schweppes, que cumple cinco décadas desde su existencia, también tiene una historia interesante y que pocos conocen. Se trata del edificio Capitol, un inmueble de catorce plantas que fue diseñado por los arquitectos Luis Martínez-Feduchi Ruiz y Vicente Eced y Eced y construido entre 1931 y 1933. Su estilo de art déco con materiales como mármol y granito y la decoración y los muebles de su interior hacen que sea un edificio muy especial y único.

DECLARADO BIEN DE INTERÉS CULTURAL EL EDIFICIO DEL CARTEL DE SCHWEPPES

El proyecto original albergaba 64 apartamentos, un hotel (el Capitol, en la actualidad del grupo Vincci), una cafetería, un bar, un restaurante, una fábrica de agua de selz y oficinas y salas de fiesta. 

Por todo ello, en abril de 2018, fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por el Gobierno de la Comunidad de Madrid, tanto por su estilo arquitectónico como por su carácter icónico en la Gran Vía. Un sello de la ciudad cuyo verdadero nombre es edificio Carrión en honor a Enrique Carrión, propietario del terreno donde está construido.

Sin embargo, este nombre apenas ha sido usado por los madrileños, quienes apodaron al grandioso edificio con el mismo nombre que los cines Capitol. Muchas personas tras la inauguración del edificio comenzaron a sentir curiosidad de cómo sería su interior, puesto que contaba con avances tecnológicos poco comunes en la década de los 70. Un ejemplo de ello es el sistema de refrigeración centralizado que tenía, el cual ocupaba toda una planta entera.

Aunque el edificio Capitol está protegido por el Gobierno autonómico dado que es un Bien de Interés Cultural, el cartel luminoso de Schweppes no lo está. Pese a ello, las autoridades no han mostrado en ningún momento interés por deshacerse del mismo y el emblema de Gran Vía ha sido el único que se ha mantenido años tras años a diferencia de otros que iluminaban la capital como los viejos anuncios de Camel, Grundig y Fortuna.