Para comer sano, las ensaladas y el verano son una unión indivisible, suelen ser la opción más sencilla y refrescante para tomar como entrante, pero también como plato único, tanto en comidas como en cenas.
Pero sin duda lo más importante es no caer en la monotonía de las ensaladas con lechuga y poco más, sino jugar con los ingredientes y las combinaciones para encontrar las ensaladas que más nos apetezcan. Estas ensaladas son ideales para el verano por lo refrescantes que son, y resultan un plato más completo sin temor a quedarnos con hambre ni acabar cansándote de ellas.