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El Hayedo de Tejera Negra, rojos y ocres nos esperan

Existen pocos rincones tan cerca de Madrid y a la vez tan desconocidos como es la sierra del Ocejรณn, que custodia su popular ruta de la Arquitectura Negra en el norte de Guadalajara; o la Sierra de Pela, rayana con la vecina Soria, y ambas a escasos quilรณmetros una de la otra.

La ruta del Romรกnico Rural de Guadalajara, un legado de los cristianos que repoblaron esta zona a finales del siglo XI, deberรญa de ser visita obligada todos los otoรฑos, un recorrido que tiene su mejor representante en Villacadima, muy cerca de Galve de Sorbe, donde a la sombra de su abandonado castillo podremos tomar nuevas fuerzas, tanto en el hostal como en la casa rural de dicha poblaciรณn.

Desde Madrid se puede acceder por la A-2, si no tenemos miedo a las curvas, o por la carretera de Burgos, la A-1 si deseamos disfrutar de un paisaje mรกs rectilรญneo, en ambos casos, las vistas infinitas estรกn aseguradas.

Villacadima, un pueblo prรกcticamente deshabitado, estรก resurgiendo a base de casas de segunda residencia y en gran medida la culpa la tiene su iglesia romรกnica, Bien de Interรฉs Cultural como no podรญa ser de otra manera.

Podremos descansar en Galve de Sorbe, en la ladera norte de la sierra del Alto Rey, junto al castillo de los Estรบรฑiga, con su flamante torre del homenaje que esta luchando por seguir en pie y que las administraciones pรบblicas se encarguen de ello, batalla diferente para las que fue creado, pero que en estos tiempos, por desgracia, estรก presente en demasiados frentes.

Con la puerta derribada, los valientes entran en este pasado arreglado a base de rasillรณn y bloque de hormigรณn, una pena para un castillo desde el que se divisa gran parte de la Serranรญa de Guadalajara, y si nuestra vista es agraciada, seremos capaces de enfocar la plaza Mayor del municipio, donde una picota gรณtica (s. XIV-XV) nos invita a conocer mรกs de la historia y de las gentes de esta zona tan cercana y a la vez tan lejana.

Es en el otoรฑo, cuando un mayor nรบmero de visitantes buscan la hoja caรญda en el Hayedo de Tejera Negra, la hoja caรญda y la infinidad de tonalidades de rojos y ocres que pintan las copas de los รกrboles, de las que aรบn no se han venido abajo.

Muy cerca de nuestros dos pueblos, a mitad de cada uno de ellos se encuentra Cantalojas, y el hayedo mรกs al sur de Europa, en el que muchos habitantes de estos pueblos, ayudaron a crecer y recuperarse hace ya mรกs de 70 aรฑos.

Su orografรญa asรญ como su clima, caracterizado por unos inviernos muy frรญos, de los mรกs frรญos de Espaรฑa y unos veranos suaves, hacen de รฉl un lugar idรณneo para la bรบsqueda de setas y hongos, manjares muy demandados, entre los que destacan los Boletus Edulis.

Pero cualquier momento es bueno par conocer este rincรณn, disfrutar de un baรฑo en las innumerables pozas de los rรญos Lillas y Zarzas, que nacen del glaciar La Buitrera, disfrutar el majestuoso vuelo del รกguila real, el milano real o el azor.

El Parque cuenta con un Centro de Interpretaciรณn y ofrece rutas guiadas los sรกbados y domingos de octubre y noviembre, y aunque la entrada es libre en otoรฑo es necesario reservar plaza de aparcamiento.

En las cercanรญas destaca tambiรฉn Valverde de los Arroyos, nombrado recientemente como uno de los pueblos mรกs bonitos de Espaรฑa, municipio que destaca por el uso de la arquitectura negra en sus construcciones, caracterizada por el empleo de la pizarra y por su uniรณn con la naturaleza, donde destaca las chorreras de Despeรฑalagua, una cascada con una caรญda de mรกs de ochenta metros de altura, que no podemos dejar de ver.

El Hayedo de Tejera Negra, rojos y ocres nos esperan

Existen pocos rincones tan cerca de Madrid y a la vez tan desconocidos como es la sierra del Ocejรณn, que custodia su popular ruta de la Arquitectura Negra en el norte de Guadalajara; o la Sierra de Pela, rayana con la vecina Soria, y ambas a escasos quilรณmetros una de la otra.

La ruta del Romรกnico Rural de Guadalajara, un legado de los cristianos que repoblaron esta zona a finales del siglo XI, deberรญa de ser visita obligada todos los otoรฑos, un recorrido que tiene su mejor representante en Villacadima, muy cerca de Galve de Sorbe, donde a la sombra de su abandonado castillo podremos tomar nuevas fuerzas, tanto en el hostal como en la casa rural de dicha poblaciรณn.

Desde Madrid se puede acceder por la A-2, si no tenemos miedo a las curvas, o por la carretera de Burgos, la A-1 si deseamos disfrutar de un paisaje mรกs rectilรญneo, en ambos casos, las vistas infinitas estรกn aseguradas.

Villacadima, un pueblo prรกcticamente deshabitado, estรก resurgiendo a base de casas de segunda residencia y en gran medida la culpa la tiene su iglesia romรกnica, Bien de Interรฉs Cultural como no podรญa ser de otra manera.

Podremos descansar en Galve de Sorbe, en la ladera norte de la sierra del Alto Rey, junto al castillo de los Estรบรฑiga, con su flamante torre del homenaje que esta luchando por seguir en pie y que las administraciones pรบblicas se encarguen de ello, batalla diferente para las que fue creado, pero que en estos tiempos, por desgracia, estรก presente en demasiados frentes.

Con la puerta derribada, los valientes entran en este pasado arreglado a base de rasillรณn y bloque de hormigรณn, una pena para un castillo desde el que se divisa gran parte de la Serranรญa de Guadalajara, y si nuestra vista es agraciada, seremos capaces de enfocar la plaza Mayor del municipio, donde una picota gรณtica (s. XIV-XV) nos invita a conocer mรกs de la historia y de las gentes de esta zona tan cercana y a la vez tan lejana.

Es en el otoรฑo, cuando un mayor nรบmero de visitantes buscan la hoja caรญda en el Hayedo de Tejera Negra, la hoja caรญda y la infinidad de tonalidades de rojos y ocres que pintan las copas de los รกrboles, de las que aรบn no se han venido abajo.

Muy cerca de nuestros dos pueblos, a mitad de cada uno de ellos se encuentra Cantalojas, y el hayedo mรกs al sur de Europa, en el que muchos habitantes de estos pueblos, ayudaron a crecer y recuperarse hace ya mรกs de 70 aรฑos.

Su orografรญa asรญ como su clima, caracterizado por unos inviernos muy frรญos, de los mรกs frรญos de Espaรฑa y unos veranos suaves, hacen de รฉl un lugar idรณneo para la bรบsqueda de setas y hongos, manjares muy demandados, entre los que destacan los Boletus Edulis.

Pero cualquier momento es bueno par conocer este rincรณn, disfrutar de un baรฑo en las innumerables pozas de los rรญos Lillas y Zarzas, que nacen del glaciar La Buitrera, disfrutar el majestuoso vuelo del รกguila real, el milano real o el azor.

El Parque cuenta con un Centro de Interpretaciรณn y ofrece rutas guiadas los sรกbados y domingos de octubre y noviembre, y aunque la entrada es libre en otoรฑo es necesario reservar plaza de aparcamiento.

En las cercanรญas destaca tambiรฉn Valverde de los Arroyos, nombrado recientemente como uno de los pueblos mรกs bonitos de Espaรฑa, municipio que destaca por el uso de la arquitectura negra en sus construcciones, caracterizada por el empleo de la pizarra y por su uniรณn con la naturaleza, donde destaca las chorreras de Despeรฑalagua, una cascada con una caรญda de mรกs de ochenta metros de altura, que no podemos dejar de ver.