Los vecinos de Boadilla del Monte y otros municipios cercanos, que visitan con frecuencia las piscinas municipales de Boadilla, vivían con temor el pasado domingo, cuando vieron entrar en acción al socorrista de la piscina de este bello pueblo de la zona oeste de Madrid.
Un hombre joven, de unos 28 años de edad, entraba en parada cardio respiratoria mientras nadaba en la piscina, y eran en primera instancia los socorristas de las instalaciones municipales, los que le atendían mientras llegaban los servicios de Emergencias Municipal y Protección Civil.
Gracias a su rápida intervención y a su experiencia, pudieron atenderlo correctamente y ser trasladado a un hospital cercano para darle las atenciones necesarias.
La atención en los primeros minutos es fundamental, ya que se produce un cese brusco e inesperado de la respiración pulmonar y de la circulación sanguínea, pero que con unos ejercicios bien definidos y realizados, puede ser reversible, como así ha sido en este caso.
El peligro reside en que al no llegar oxígeno a todo el cuerpo, pueden dañarse las células del cerebro y otros órganos fundamentales para la vida.
Conocer unas nociones básicas puede ser para el 20% de los afectados anualmente en nuestro país, la diferencia entre llegar con vida al hospital más cercano o fallecer.
Hasta el próximo 15 de Septiembre, todos los vecinos y visitantes de las piscinas municipales, podrán seguir utilizando estas excelentes instalaciones veraniegas, sabiendo de la calidad de los profesionales que las atienden.
