Todas las personas sueƱan con una jubilaciĆ³n sin preocupaciones econĆ³micas. DespuĆ©s de toda una vida trabajando, aspiran a disfrutar de un tiempo libre bien merecido. Sin embargo, no fue asĆ para un hombre, que vio cĆ³mo su estabilidad econĆ³mica y emocional se desmoronaba.
El caso que ocupa es el de un hombre de 67 aƱos, jubilado y pensionista, cuya esposa tiene graves problemas de salud. El cliente ha tenido una vida laboral intensa y extensa. TrabajĆ³ como transportista y como profesional del sector de la hostelerĆa. Al mismo tiempo, compaginaba su empleo con las labores de entrenador de fĆŗtbol infantil.
Sus problemas comenzaron en 2013, cuando perdiĆ³ su empleo y su mujer enfermĆ³ de cĆ”ncer. Con 57 aƱos y en una etapa econĆ³micamente convulsa, sus posibilidades de incorporarse de nuevo al mercado laboral eran casi nulas. AdemĆ”s, su cĆ³nyuge necesitaba cuidados a causa de su enfermedad.
La hipoteca se convirtiĆ³ en una losa que pendĆa sobre su cabeza. Las cuotas mensuales eran inasumibles y el banco, implacable. Ante la imposibilidad de pagar la hipoteca, se vio obligado a entregar su vivienda habitual.
Lejos de mejorar, la situaciĆ³n no parecĆa tener soluciĆ³n. Cuando contactĆ³ con Libertad sin Deudas, acumulaba impagos por un importe total de 32.924,44 euros. El abogado concursal Eloy RodrĆguez se reuniĆ³ con el afectado para analizar su caso y resolver las dudas relacionadas con la Ley de Segunda Oportunidad.
Una vez que el hombre tomĆ³ la decisiĆ³n de acudir a los juzgados, el letrado realizĆ³ las gestiones necesarias para solicitar el Beneficio de ExoneraciĆ³n del pasivo Insatisfecho (BEPI). El primer trĆ”mite consistiĆ³ en intentar un acuerdo extrajudicial de pagos con los acreedores, una alternativa que no obtuvo Ć©xito.
AsĆ pues, se presentĆ³ en el Juzgado de Primera Instancia nĆŗmero 50 de Barcelona la solicitud de exoneraciĆ³n de deudas. El magistrado estudiĆ³ la peticiĆ³n y llegĆ³ a la conclusiĆ³n de que se cumplĆan todos los requisitos que marca la ley. Se trataba de un deudor de buena fe que no habĆa incurrido en delitos contra el patrimonio, de falsedad documental, contra Hacienda o la Seguridad Social en los diez aƱos previos.
En el auto, el magistrado Ćŗnicamente excluyĆ³ de la exoneraciĆ³n una deuda de 757,26 euros, adquirida con el Ayuntamiento de Barcelona. Para saldarla, se aprobĆ³ un plan de pagos de 12,63 euros al mes durante 60 meses.
Cabe recordar que las deudas con Hacienda, Seguridad Social y otras entidades pĆŗblicas tienen una consideraciĆ³n legal diferente en la Ley de Segunda Oportunidad. EstĆ” previsto que se pueda cancelar el 50 % con cada uno de los organismos citados y por un importe mĆ”ximo de 10.000 euros, respectivamente.
La deuda pĆŗblica es la razĆ³n por la que se concediĆ³ la exoneraciĆ³n provisional, a falta de cumplir el plan de pagos que, por otra parte, resultaba asumible para el cliente de Libertad Sin Deudas.
DespuĆ©s de una dĆ©cada de preocupaciones econĆ³micas, este hombre puede disfrutar de su jubilaciĆ³n gracias a la Ley de Segunda Oportunidad y al asesoramiento de Libertad Sin Deudas. El procedimiento para conseguir la exoneraciĆ³n tan solo durĆ³ un aƱo y nueve meses.