Hablan los trabajadores del intercambiador de Plaza de Castilla: “Cuando se van los jefes, apagan el aire acondicionado”

Las altas temperaturas que están afectando a Madrid en las últimas semanas han hecho que los lugares con aire acondicionado se vuelvan “paraísos” para los madrileños. Algo que, sin embargo, no sucede en el transporte público de Madrid, donde se acumulan las quejas por la falta de climatización. En el caso del intercambiador de Plaza Castilla, la presencia de aire acondicionado por los pasillos no depende de la temperatura externa, ni de la cantidad de pasajeros que se encuentren en el intercambiador.

Este mes de junio se ha convertido, según los registros, en el más caluroso que se recuerda en la Comunidad de Madrid. Y es que los termómetros han registrado, durante varios días, temperaturas superiores a los 40ºC.

Unas temperaturas que han hecho que muchos madrileños busquen cobijo del calor en parques o centros comerciales. Algo que no siempre ha sido posible, debido a los constantes y polémicos cierres de los principales parques naturales de la capital española, como el Parque de El Retiro.

Pero más complicado aún lo han tenido los usuarios del transporte público de Madrid. Y en especial, los usuarios del Metro. Y es que muchas han sido las quejas de los usuarios del suburbano ante la falta de aire acondicionado en los andenes y, en especial, dentro de los trenes de Metro. Algo que ha provocado incluso que algunos viajeros lleguen a marearse debido al sofocante calor (con mascarilla incluida) que se vive en el suburbano.

LOS “JEFES” DE PLAZA DE CASTILLA DECIDEN EL CALOR QUE PASAN LOS VIAJEROS

Pero, si bien la falta de aire acondicionado, o al menos, de una temperatura agradable, es algo generalizado en el transporte público, el intercambiador de Plaza de Castilla ha conseguido convertirse en el foco de atención en esta cuestión. Y es que, tal y como han podido experimentar muchos de los viajeros que transitan por este conocido intercambiador, la temperatura varía considerablemente a lo largo del día.

Así pues, si bien a las horas centrales del día, el aire acondicionado hace que las instalaciones tengan una temperatura aceptable, e incluso frío, en otros momentos, el aire acondicionado brilla por su ausencia en el gran intercambiador. Una situación que no ha pasado desapercibida para los trabajadores del intercambiador de Plaza de Castilla.

Unos trabajadores que, tal y como ha podido saber Qué!Madrid, lamentan que el aire acondicionado del edificio cambie según las apetencias de los “jefes” de Plaza de Castilla. Y, en concreto, de si se encuentran en el intercambiador o no.

“PUEDEN HACER LO QUE QUIERAN”

Se comenta en los pasillos del intercambiador. Y también en las conversaciones entre trabajadores de Plaza de Castilla y los acalorados viajeros. Hace calor a algunas horas, principalmente por la tarde, y el aire acondicionado no parece estar activo. Y es debido a la presencia, o ausencia, de los gerentes del edificio.

“En verano se van antes. Se van sobre las 15:00, porque pueden hacer lo que quieran. Y cuando se van, se quita el aire acondicionado”. Así lo aseguran trabajadores de Plaza de Castilla, tal y como ha podido saber este diario. Algo que, desde luego, deja en condiciones casi infrahumanas a los trabajadores y a los viajeros.

EL CALOR AFECTA A LOS VIAJEROS DEL METRO

Altas temperaturas en el intercambiador de Plaza de Castilla que “asfixia” a sus viajeros en los días más calurosos que se recuerdan en junio en Madrid. Algo que se sigue repitiendo en el suburbano de la capital.

Y es que, a pesar de las continuas quejas y críticas de los usuarios del Metro, el calor sigue siendo el gran protagonista de andenes y vagones del suburbano estos días. Un asfixiante calor que la obligación del uso de mascarilla no hace más que incrementar, haciendo que algunos pasajeros lleguen a marearse durante el trayecto.

Algo que provoca las constantes llamadas de atención de los usuarios de Metro a través de las redes sociales, recibiendo una única respuesta: que el servicio de climatización es “automático”, y por tanto, las temperaturas son correctas. Una excusa que, sin embargo, no parece poder extrapolarse en el caso del intercambiador de Plaza de Castilla.