Desplantes, insultos y expulsión de los Plenos. Asà es como el concejal Francisco Javier RamÃrez dirige su distrito. Gestión “poco democrática” que se produce en contra de los intereses de los vecinos, y de su propio partido. Un partido que, en el Madrid de Almeida, mantiene el silencio.
“Lo que tenemos en Chamberà no es un concejal, es una desgracia”. Palabras con las que fuentes vecinales del distrito de Chamberà describen para este diario al concejal ‘popular’ Francisco Javier RamÃrez. Expresiones y lamentos que se repiten por todo el territorio gestionado por RamÃrez, donde las quejas contra el polÃtico se multiplican.
Desde Montecarmelo, las asociaciones vecinales tampoco dudan en mostrar su absoluto malestar con el concejal y sus “continuos desplantes”, que se suceden desde la llegada de RamÃrez a la ConcejalÃa. Asà pues, RamÃrez llegaba al cargo en 2019, momento en el que comenzaba a ‘ningunear’ a las asociaciones de vecinos. Asociaciones como la Asociación Vecinal Barrio de Montecarmelo, que tuvo que esperar un año para reunirse con el ‘popular’.
“Ahà fue el primer enfrentamiento, por nuestras alusiones a la inacción del Ayuntamiento ante el ruido, las terrazas, el tráfico…” han recordado desde la asociación de vecinos. Un encuentro tenso que acababa dictaminando el resto de encuentros entre ambos grupos.
DESPLANTES CONTINUADOS DESDE SU LLEGADA
El desprecio verbal, asà pues, se ha mantenido durante estos últimos años, al igual que el rechazo frontal a las asociaciones. “Es el concejal de la democracia” ironizan las asociaciones, que se han visto ninguneadas por el concejal.
VacÃo hacia estas asociaciones que se ha podido comprobar en el último Pleno, celebrado este 6 de abril, momento en el que la Asociación Vecinal ‘El Organillo’ de Chamberà era, una vez más, expulsada por el concejal, que evitaba asà dar explicaciones. “Nos expulsó. Esa es la participación ciudadana que se permite en ChamberÔ. Explicaciones que también se negaba alegando que la pregunta presentada por la Asociación no estaba escrita “entre interrogaciones”.
Ni siquiera la pandemia del coronavirus consiguió que este concejal se apoyase en los vecinos de su distrito. Y es que, según fuentes de este diario, en junio de 2020, varias asociaciones pertenecientes a Fuencarral, Barrio del Pilar, Begoña, Santa Ana y Montecarmelo se unieron para una gran recogida de alimentos. Una iniciativa en la que se involucraron más de 80 personas, que acabó siendo cortada por RamÃrez. Y es que, un dÃa antes del evento solidario, el concejal denegó los permisos “por uso privativo del espacio público”.
UN VIEJO CONOCIDO DE LA JUSTICIA
Ninguneo a las asociaciones de vecinos que, sin embargo, no son la primera polémica que rodean al concejal del PP. Y es que ya son tres las condenas que pesan sobre RamÃrez en los últimos meses. La primera de ellas, por prohibir un debate en el Pleno que centrara la lucha y actuaciones contra la LGTBIfobia. La segunda, por licencias urbanÃsticas.
Pero tal vez sea la tercera de ellas la que demuestra Ãntegramente la “democracia” del concejal: y es que la condena se producÃa después de la orden del concejal de multar a unos vecinos que recogÃan firmas contra su gestión en la calle Fuencarral.
“Las sentencias siguen cayendo, y él sigue ahÔ se lamentan los vecinos. Sentencias que se acumulan, a la vez que, según fuentes de las asociaciones, miembros del PP municipal se desmarcan de sus polÃticas. “Es una persona que no pertenece al PP. El problema es que le dejan ahÔ.
CONCEJAL DE LA CONFIANZA DE ALMEIDA
Polémicas que rodean al concejal, que no sólo es conocido por olvidarse de sus vecinos y asociaciones vecinales. Y es que a RamÃrez también se le conoce por ser un asiduo de los bares de la calle Ponzano y Jorge Juan, visitándolos más que su propio despacho.
Actitud que muchos vecinos y polÃticos del distrito madrileño continúan cuestionando desde su nombramiento en 2019, pero que parece no llegar al Ayuntamiento de Madrid. Asà pues, incluso José Luis MartÃnez-Almeida salÃa en defensa del concejal ante las polémicas.
“No conviene dramatizar sobre lo que se dice en un debate municipal” justificaba Almeida ante las palabras de RamÃrez, que no dudaba en asegurar que a él le gustaban más “las femeninas que el feminismo”.
Relación cercana entre ambos que hacÃa que el alcalde madrileño oficializara la boda del concejal en 2021.