CentroCentro, el Museo de Historia y la Imprenta Municipal se suman con exposiciones a la celebración del Día del Agua

Para dar visibilidad al Día Mundial del Agua, tres espacios del Ayuntamiento de Madrid, CentroCentro, el Museo de Historia y la Imprenta Municipal, se suman a esta efeméride con sendas exposiciones dedicadas a este recurso natural esencial, ha informado este sábado el Consistorio matritense en una nota de prensa.

El 22 de diciembre de 1992 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 22 de marzo como el Día Mundial del Agua. La dedicación de este día, que comenzó a celebrarse en 1993, persigue concienciar sobre la crisis mundial del agua, así como la necesidad de buscar medidas para abordarla y alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible número seis: lograr agua y saneamiento para todos antes de 2030.

La exposición ‘Dulce Agua’, que estará abierta al público del 24 de marzo al 21 de agosto, con entrada libre, reúne 60 piezas y proyectos nacionales e internacionales que muestran lo que están haciendo los diseñadores respecto a este problema. La muestra descubre objetos relativos al mundo del agua como nuevas versiones de botijos, jarras o botellas que animan al consumidor a beber agua del grifo o de fuentes públicas y prescindir de las dañinas botellas de plástico de un solo uso.

También puede verse un proyecto que propone soluciones como recoger el agua de lluvia, extraer agua de la atmósfera, almacenarla, transportarla, filtrarla, desalinizarla, depurarla y utilizarla con mayor conciencia. Algunas propuestas muestran el ingenio necesario para sugerir maneras de emplear materiales de desecho resultantes de los procesos de producción del agua corriente.

Además, se exhiben proyectos cuya intención es sensibilizar al ciudadano y llamar la atención sobre algunos excesos de los procesos de producción como el hecho de que se empleen 7.500 litros de agua para fabricar un solo pantalón vaquero o que se drenen 1.695 litros de agua para poner una hamburguesa en la mesa.

En relación con la polución de los océanos (se estima que habrá más plástico que peces en los océanos en 2050), se muestra una selección de muebles, objetos, tejidos, prendas o calzado realizados a partir de plásticos rescatados del mar a través de productos realizados tanto por diseñadores que experimentan con esa idea a pequeña escala como por grandes empresas que incorporan estas prácticas sostenibles, asociadas a la limpieza de océanos y ríos, al proceso de fabricación de sus productos.

Entre los proyectos que muestra Dulce agua destacan el recolector de lluvia Aquatecture, diseñado por Shaakira Jasssat para Studio Sway, un panel que se puede colocar en la fachada de edificios o se puede usar como elemento independiente, creando estaciones de recolección de agua en cualquier lugar; el prototipo de botella Solar Bottle, de Francisco Gómez Paz y Alberto Meda, que al exponerse al sol durante seis horas hace que los patógenos del agua se destruyan convirtiendo el agua contaminada en potable, o el destilador de agua solar portátil Solar Distiller, del diseñador Henry Glogau, que purifica el agua usando energía solar y se puede ensamblar con materiales baratos y fácilmente disponibles.

Con el objetivo de sensibilizar se encuentra los proyectos ‘Wonderwater Cafés: How Much Water Do You Eat?’, de Jane Withers y Kari Korkman, desarrollado en colaboración con científicos del agua de la Universidad Aalto de Helsinki y el King’s College de Londres. El ‘Wonderwater Café’ quiere concienciar sobre la huella hídrica de los alimentos y hacer pensar sobre el impacto de lo que se come en los recursos hídricos locales y globales por lo que sus menús ilustran el desglose del agua utilizada para producir los ingredientes de los platos que sirven.

O el proyecto ‘Beachcombers’, de Gundega Strauberga, que plantea un escenario de ficción de diseño en el que las personas que viven en pueblos cerca del mar han ideado una nueva artesanía para limpiar las costas y el futuro de los souvenirs artesanales hechos de contaminación marina, de redes y cuerdas que han sido arrastradas a la orilla, un subproducto de industrias pesqueras insostenibles.

LOS VIAJES DEL AGUA EN MADRID

También con motivo de la celebración del Día del Agua y para dar a conocer un elemento de gran valor histórico como son los viajes de agua en la ciudad de Madrid, la Imprenta Municipal y al Museo de Historia de Madrid van a exponer durante un mes fondos relacionados con estos elementos.

Con estas dos muestras se quiere dar a conocer la historia del abastecimiento de agua en la ciudad, desde el sistema de los viajes de agua, de origen medieval, hasta la creación del Canal de Isabel II a mediados del siglo XIX y el del Canal de Lozoya, origen del anterior.

El Museo de Historia situará, en su espacio dedicado a la Pieza del Mes, las llaves que conserva de estos viajes (Abroñigal, Castellana y Alcubilla) y un grabado del plano de alcantarillado de 1735, momento en que se realizó toda una remodelación del saneamiento de la ciudad.

Por su parte, la Imprenta Municipal-Artes del Libro expondrá dos planos de interés relacionados con el agua en Madrid. Estos planos constituyen los ejemplos de los dos modelos del abastecimiento de agua en la ciudad a lo largo de su historia: el Canal de Isabel II y el plano general correspondiente a la Memoria de 1911 y el plano de los viajes de agua de Madrid, contenido en el libro Información de la Ciudad de 1929. Las muestras permanecerán abiertas del 22 de marzo al 26 de abril, de martes a domingo, de 10 a 20 horas.