Alerta de contaminación en un colegio madrileño: Más Madrid exige al Ayuntamiento que tome medidas

La portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, Rita Maestre, ha exigido al alcalde, José Luis Martínez-Almeida, protección para los escolares tras medir a la hora de entrada en el CEIP Palacio Valdés, en el Paseo del Prado, los altos niveles de contaminación por partículas en suspensión.

Maestre, acompañada por la concejala Carolina Pulido, ha iniciado una serie de mediciones de partículas en suspensión a la entrada y salida de los centros educativos en el marco de su campaña por unos entornos escolares saludables y seguros. Lo hacen ante “la inacción del Gobierno de Almeida”, han reprochado en un comunicado.

Desde el entorno del Palacio Valdés, ha insistido en su propuesta de ampliar Madrid Central a todo el interior de la M-30 para reducir “entre un 25 y un 40% los vehículos que circulan por el Paseo del Prado, donde está el colegio”.

Del alcalde ha destacado que “deniega cortes de tráfico a la entrada y salida de los colegios y ni siquiera responde a las peticiones de los centros”, por lo que le insta a “dejar de perder el tiempo y a actuar de una vez por todas adoptando medidas eficaces contra la contaminación porque está en juego la salud de los más pequeños, que son más vulnerables”. La edil ha recordado que la contaminación es especialmente dañina para los escolares porque sus pulmones están todavía en desarrollo.

SUPERACIÓN EN PARTÍCULAS EN SUSPENSIÓN

Más Madrid ha constatado a la entrada del colegio que el índice de acumulación de las partículas finas (PM 2,5) “supera de forma amplia el umbral que la OMS considera admisible”. Para partículas finas el umbral que marca la OMS es de 15 *g/m3.

Eso ha llevado a Maestre a insistir en las medidas que proponen, en colaboración con las comunidades educativas de todos los distritos, con cortes de tráfico a la entrada y la salida de los centros, limitando la velocidad a 20 km/, peatonalizaciones permanentes y la pacificación de las zonas aleñadas. También han recordado que la Ley de Cambio Climático presta atención a los entornos escolares.

“Sin embargo, a pesar de todas las llamadas de atención, a pesar de las elevadas cifras de contaminación, que Madrid incumple las recomendaciones de la OMS y los niveles que establece la Unión Europea, Almeida no hace nada, salvo ir en contra de lo que están haciendo el resto de ciudades europeas, que sí están transformando los entornos urbanos para hacer de ellos lugares más sanos, más verdes y más sostenibles”, ha denunciado públicamente Rita Maestre.

CORTES DE TRÁFICO

La concejala Carolina Pulido ha expresado la preocupación de Más Madrid por la elevada siniestralidad el pasado año. “En la ciudad de Madrid los atropellos son una de las principales causas de muerte en accidentes de tráfico desde hace ya varios años”, por lo que es prioritaria la pacificación de los entornos escolares, ha argumentado.

En 2020 se produjeron 14.168 accidentes de tráfico en Madrid, de los que 947 fueron atropellos, con 1.006 heridos y doce personas fallecidas.

Sin embargo, “el Gobierno municipal hace caso omiso” porque el área de Medio Ambiente y Movilidad “ha denegado de manera explícita dos cortes de tráfico en la entrada y salida de dos centros educativos, en lugares en los que es visiblemente sencillo realizar este tipo de interrupciones a la circulación, como son la escuela infantil Lolo Rico (Centro) y el CEIP Ciudad Pegaso (San Blas-Canillejas)”.

“Además tenemos constancia de que hay un elevado número de centros que no ha obtenido respuesta a sus solicitudes de mejora y pacificación de su entorno y accesos”, ha trasladado la edil.

A iniciativa de Más Madrid se aprobó una enmienda en la nueva ordenanza de Movilidad para que todas las vías en las que haya un centro educativo sean consideradas calles escolares, en las que los vehículos no puedan sobrepasar los 20 kilómetros por hora.

En diciembre pasado, Más Madrid inicio una campaña de mediciones de velocidad en la entrada de varios centros escolares y comprobó que “no solo no se cumplían los 20km/h, sino que los coches pasan a más de 40 y a más de 50km/h”. “Sin embargo, el Gobierno de Almeida no ha señalizado nada”, han lamentado.