Familiares denuncian la tristeza de los mayores por el cierre a las visitas del 10% de los geriátricos

Más del 10% de los geriátricos de la región están cerrados a visitas por brotes de Covid-19, algo que critican familiares de residentes, que advierten de la “tristeza y soledad” que está medida provoca entre los ancianos.

Concretamente, según los últimos datos disponibles del pasado martes, aportados por la Consejería de Familia y Política Social, había brotes de coronavirus (tres o más casos) en 131 de las cerca de 500 residencias de ancianos que hay en la Comunidad de Madrid, que afectaban a 2.251 usuarios y trabajadores. De ellos solo 86, el 3%, han tenido que ser derivados a centros hospitalarios, por lo que la inmensa mayoría de los casos han pasado la enfermedad con síntomas leves gracias a que la totalidad de este colectivo está vacunado y la mayoría con terceras dosis.

De esos 131 geriátricos con brotes, en 53 de ellos la autoridad sanitaria ha determinado que cerraban a visitas y salidas de cualquier tipo y a acoger nuevos ingresos. El objetivo es controlar el brote. La clausura al exterior de una residencia con brote la decide la autoridad sanitaria en base a la arquitectura del centro, los circuitos de salida y llegada, sectorización, protocolos de aislamiento, etcétera.

Asociaciones de familiares de residentes como la Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores (Pladigmare), Marea de Residencias o la Plataforma Estatal de Familiares de Residentes critican que este tipo de cierres “vulnera los derechos de los mayores y sus familias” y es perjudicial para el estado de ánimo y la salud de los ancianos.

“Termina otra semana y gran parte de las residencias siguen cerradas a las visitas, una semana más sin ver a familia y amigos, una semana más en la que se siguen vulnerando derechos, una semana más de tristeza y soledad, una semana que no volverá. ¿Hasta cuándo se va a permitir?”, señala la plataforma estatal en redes sociales.

En la misma línea abundan desde la Marea de Residencias, que los califican de “encierros insufribles e inhumanos”. “¿No se dan cuenta del daño psicológico que les están provocando? ¿Hasta cuando? Cuando para el resto de los ciudadanos se está hablando de gripalizar el Covid….¿por qué encarcelan a nuestros familiares? ¿por qué nos prohíben visitarles? ¿Por qué se nos priva de ese derecho?. Pues porque hay tan poco personal que prefieren que no entremos y veamos lo que sucede dentro. Una vergüenza”, denuncian.

Aunque no hay cifras del número de trabajadores con bajas o cuarentenas en esta última ola del Covid en la región, la Comunidad abrió a principios de mes la posibilidad de que residencias de mayores, centros de día y servicios de atención domiciliaria podrán excepcionalmente contratar empleados auxiliares sin la titulación requerida para hacer frente a la sexta ola.

Las asociaciones aseguran que no se han relevado a los empleados enfermos o aislados, como prometieron, y piden la Administración que, en vez de cerrar y dejar a los ancianos en las habitaciones, se sectorice los brotes en centros de gran tamaño como la Gran Residencia, el Reina Sofía, Usera o Montehermoso.