La Pedriza alberga más de 100 crías de buitre leonado

Las aves rapaces reinan en el cielo de La Pedriza. El buitre leonado, el buitre negro, el águila real, el águila imperial o el milano real son algunas de las especies protegidas que tienen sus nidos en este paraje natural madrileños. En La Pedriza destaca la presencia de especies rupícolas, que como el caso del buitre leonado, viven en zonas rocosas en altura. Todas estas aves protegidas anidan en este espacio gracias a los agentes forestales que operan en la zona. Gracias a su trabajo, el año pasado se criaron un centenar de nuevos pollos de buitre leonado que ya sobrevuelan este espacio natural.

Desde 1982, La Pedriza ha pasado a tener de 25 parejas de buitre leonado a alrededor de 160

Desde 1982, La Pedriza ha pasado a tener de 25 parejas de buitre leonado a alrededor de 160, lo que supone quintuplicar el número de ejemplares reproductores. Todo un hito que revaloriza el patrimonio del medio natural de la Comunidad de Madrid.

UN ÉXITO MEDIOAMBIENTAL DE LOS FORESTALES

El mantenimiento de las aves rapaces en este singular paraje madrileño es gracias a los agentes forestales que cuentan con el apoyo de la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad liderada por Enrique López. El consejero ha destacado que “gracias a la profesionalidad, formación y compromiso” de los agentes forestales y técnicos del Gobierno regional, en las últimas décadas se ha registrado un “aumento exponencial” de la presencia de aves rapaces en el conjunto de la Comunidad de Madrid.

El trabajo del Cuerpo de Agentes Forestales es un éxito medioambiental para la fauna madrileña. Lograr el equilibrio entre la protección de la fauna y flora y los visitantes en el medio natural ha sido uno de los grandes objetivos de estos profesionales. Para llevar a cabo su labor, los agentes forestales cuentan con material óptico, como prismáticos y telescopios terrestres, que permite detectar de forma temprana cualquier tipo de perturbación al inicio de la época de reproducción.

LA CASA MADRILEÑA DE LOS RAPECES

La Pedriza se ha configurado como la casa madrileña de las aves rapaces gracias a su entorno. Se trata de un gran batolítico granítico situado en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama en el termino municipal de Manzanares el Real. Formaciones rocosas, praderas y arroyos se dan cita en este paraje natural de gran valor de la Comunidad de Madrid.

La Pedriza alberga más de 100 crías de buitre leonado pedriza
La Pedriza

Este rico entorno natural ocupa 3.200 hectáreas en las que acciones mecánicas que se han ejercido sobre estas rocas durante millones de años han conformado formas muy curiosas y atractivas de los riscos. Todo un paraíso para los amantes de la escalada.

Pero a parte de las aves rapaces protegidas, La Pedriza alberga una impresionante fauna salvaje. En este espacio conviven cabras montesas, ciervos, culebras, nutrias, corzos, gamos, tejones, zorros, liebres… así como aves migratorias que ocupan temporalmente la zona. Pero sin duda, la fauna más valiosa que alberga este espacio granítico son las rapaces en peligro de extinción. La Pedriza es la casa de estas singulares especies protegidas.