El número de personas teletrabajando en la región aumentó un 200%

El número de personas teletrabajando en la región aumentó entre el cuarto trimestre de 2019 y el mismo período de 2020 un 200% a raíz de la irrupción de la pandemia del Covid-19.

Esta es una de las conclusiones del Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo (II): la evolución del teletrabajo y el empleo a tiempo parcial durante la pandemia elaborado por Adecco.

Antes de la pandemia, en el cuarto trimestre de 2019, la Comunidad de Madrid tenía el 15,6% del total de trabajadores que decían trabajar al menos ocasionalmente desde su hogar.

Tras la irrupción de la pandemia, los últimos datos del cuarto trimestre de 2020 muestran que Madrid ha pasado a encabezar el teletrabajo, con el 26,9% de todos los teletrabajadores españoles, superando a Cataluña.

En términos estatales, España hace un año, la cifra de personas que teletrabajaba, al menos ocasionalmente, alcanzaba un máximo histórico en nuestro país con algo más de 1,5 millones (el 7,9% de las personas con trabajo que había entonces en España).

Galicia, Extremadura, Cataluña y Baleares eran las autonomías que contaban con una mayor proporción de teletrabajadores. Con la irrupción de la pandemia y el decreto del Estado de Alarma en marzo de 2019, el total de personas que trabajan al menos ocasionalmente desde su hogar, más que se duplicó en el segundo trimestre del pasado año (cuando se impuso el confinamiento domiciliario), superando los 3,5 millones de personas, un récord absoluto.

Desde entonces, el total de teletrabajadores se ha moderado hasta los 2,86 millones en el cuarto trimestre en el conjunto de España, cifra que de todos modos supone un incremento interanual de un 74,2%. Esto implica que ahora hay 1,2 millones de teletrabajadores más que hace un año.

La evolución del trabajo desde casa ha tenido un comportamiento dispar entre las comunidades autónomas españolas. Aunque todas ellas muestran crecimientos interanuales en su proporción de ocupados que teletrabajan, hay diferencias importantes.

Por ejemplo, la Comunidad de Madrid y Cataluña más que han duplicado su número de teletrabajadores, con incrementos interanuales de un 200% y un 119%, respectivamente. También exhiben aumentos significativos Canarias (65,8%) y La Rioja (60%). En cambio, Aragón, Extremadura y la Comunidad Valenciana presentan incrementos inferiores al 20% (9,9%, 16,3% y 18,2%, respectivamente).

Traducidos a términos absolutos, esos incrementos porcentuales significan que, durante 2020, la Comunidad de Madrid aumentó su número de teletrabajadores en 512.000 personas (hasta un total de 767.200 individuos), mientras que Cataluña lo hizo en 350.000 personas (elevando el total hasta 645.400 teletrabajadores). Ambas comunidades concentran 7 de cada 10 nuevos teletrabajadores de toda España.

La disparidad en el crecimiento del teletrabajo ha modificado de forma significativa la distribución geográfica del teletrabajo en España. Antes de la pandemia, en el cuarto trimestre de 2019, Cataluña tenía el 18% del total de trabajadores que decían trabajar al menos ocasionalmente desde su hogar. Le seguían la Comunidad de Madrid, con un 15,6%, Andalucía, con un 15,3%, y la Comunidad Valenciana, con un 10,9%.

En total, esas cuatro autonomías daban cuenta de prácticamente el 60% del total de teletrabajadores en España. Tras la irrupción de la pandemia, los últimos datos del cuarto trimestre de 2020 muestran que Madrid ha pasado a encabezar el teletrabajo, con el 26,9% de todos los teletrabajadores españoles, superando a Cataluña, pese a que ha crecido hasta el 22,6%.

Andalucía conserva el tercer puesto, pero con menos de la mitad de teletrabajadores que Madrid y menor participación en el teletrabajo nacional, un total de un 12,8%. También se ha reducido la participación de la Comunidad Valenciana en el teletrabajo nacional, bajando hasta el 7,4%.

La presencia del teletrabajo se ha concentrado en la Comunidad de Madrid y Cataluña, que han pasado de tener un tercio del total de teletrabajadores del país a la mitad. Si se añade Andalucía y la Comunidad Valenciana, se percibe que las cuatro autonomías con mayor cantidad de teletrabajadores han pasado de tener el 60% del total al 70%. En cualquier caso, la proporción de ocupados que teletrabaja ha aumentado en todas las comunidades autónomas.

El mayor incremento se registra en la Comunidad de Madrid, donde la proporción de teletrabajadores ha dado un salto de 14 puntos porcentuales, para llegar al 22,3% de sus ocupados pudiendo trabajar desde su hogar. Es el mayor registro alcanzado por cualquier autonomía en los 15 años que cubren las estadísticas de esta variable.

Hace apenas un año, 15 autonomías tenían menos de un 10% de teletrabajadores en el total de ocupados. Ahora son solo tres: La Rioja (9,6%; +3,6 p.p.), Canarias y la Región de Murcia (9,8% en ambos casos, con incrementos, respectivamente, de 3,6 y 2,4 puntos porcentuales).

Otra de las variables que el Monitor Adecco tiene en cuenta para medir las oportunidades de conciliación de la vida personal y profesional es la inserción de la jornada parcial en el mercado de trabajo entendida como una oportunidad para compatibilizar trabajo con estudios, cuidado de familiares u otras actividades similares.

El empleo a tiempo parcial ha continuado la tendencia descendente con la que había comenzado el pasado 2019. Su descenso ha sido más marcado que el del empleo total, por lo que no solo ha caído en términos absolutos sino también como proporción del total de ocupados.

En 2020 se han perdido 145.700 empleos de tiempo parcial (-4,9% interanual). Casi uno de cada cuatro puestos de trabajo suprimidos durante la pandemia eran de este tipo. Así, la proporción de ocupados a tiempo parcial en el total de ocupados ha caído al 14%, 6 décimas menos que hace un año y el dato más bajo desde junio de 2012.

Todas las autonomías imitan el patrón general, con descensos en el porcentaje de personas que trabaja a tiempo parcial, con la sola excepción de la Comunidad Valenciana. En Navarra, Extremadura y Castilla-La Mancha, el descenso interanual es de más de un punto porcentual.

La Comunidad Valenciana ha recuperado el primer lugar, con un 16,1% de ocupados a tiempo parcial (incremento interanual de una décima), superando al País Vasco por centésimas (descenso de 6 décimas).

El mayor retroceso de otras regiones ha hecho que Castilla y León, que hace un año se colocaba en el séptimo lugar, escalara hasta la tercera plaza, con un 15,1% (2 décimas menos que un año antes).

Si al final de 2019 había dos autonomías con menos de un 13% de ocupados a tiempo parcial, ahora son tres: Canarias (12,1%; -0,8 p.p.), Baleares (12,6%; -0,1 puntos) y la Comunidad de Madrid (12,9%; -0,3 puntos).