Las actuaciones frente al COVID-19 y la limpieza de Alcorcón, temas destacados en el Debate del Municipio

La alcaldesa de Alcorcón, Natalia de Andrés (PSOE), ha afrontado este jueves su primer Debate del Estado de la Ciudad como regidora, en un año y medio de gestión marcado por la pandemia del coronavirus y la ausencia de PP y Vox en este pleno.

Dentro de su discurso ha destacado las políticas dirigidas a la limpieza de la ciudad; a la recuperación del patrimonio de Emgiasa; y aquellas destinadas a paliar las consecuencias de la crisis sanitaria del COVID-19 y económica de la ciudad.

“Cuando tomamos posesión de nuestro cargo hace año y medio no podíamos adivinar que los proyectos y prioridades incorporados desde la ilusión y el compromiso a nuestros programas de Gobierno deberían redefinirse para adaptarse a las nuevas necesidades de la ciudad tras la crisis”, ha comenzado De Andrés.

En relación a este punto, según ha dicho, entre otras cuestiones, se ha instaurado un equipo de informadores covid a pie de calle; y se han reforzado los Servicios Sociales (destacando la tramitación de recursos esenciales, tales como comida y ayuda a domicilio, fondos de emergencia o el banco de alimentos).

Además, se ha diseñado una campaña de prevención en el ámbito escolar y prestado tablets a familias vulnerables; se han repartido más de 70.000 mascarillas infantiles a todos los alumnos de primaria e incrementado la limpieza en los centros escolares.

“Se ha empleado casi 250.000 euros en el refuerzo de la limpieza como consecuencia del Covid-19 desde la apertura de las clases”, ha subrayado, añadiendo que, además, se acaba de aprobar una subvención de 200.000 euros para la compra de filtros HEPA para los colegios.

ESMASA Y EMGIASA

Aunque, antes de su entrada al Gobierno local, una de las principales apuestas de ambos grupos, PSOE y Unidas Podemos Ganar Alcorcón, fue que, “en menos de un año, nuestros vecinos pudieran disfrutar de una ciudad limpia”.

Para ello, se presentó un plan de reestructuración que, según ha recordado la primera edil, buscaba hacer productiva a la Empresa Municipal de Servicios de Alcorcón (Esmasa), encargada de la limpieza y la recogida de residuos en la ciudad.

Esta, entre otras cuestiones, incluía la puesta en marcha de un plan de gestión “que garantizase su futuro como empresa totalmente pública y tendente a su transformación en empresa productiva ligada al reciclaje para conseguir paulatinamente su autosuficiencia”, ha subrayado.

Un proyecto que ha supuesto, según la primera edil, una mejora en el servicio de recogida y también de la gestión de los dos puntos limpios, y el despliegue de un sistema de otros móviles; así como la limpieza ‘Barrio por barrio’, un plan de choque en el que “participan los vecinos” con sus sugerencias; y que ha culminado con la aprobación de la municipalización de los servicios de Esmasa “para regularizar y garantizar los servicios para regularizar y garantizar los servicios anteriormente prestados por empresas externas al Ayuntamiento”.

La iniciativa, que se votó el pasado lunes ha salido adelante con los votos de PSOE y Podemos, que forman parte del Ejecutivo local, recoge servicios tales como el mantenimiento de semáforos, de fuentes ornamentales y de instalaciones eléctricas y térmicas de edificios municipales, además de la grúa y de la limpieza de dependencias municipales y colegios.

Otro de los aspectos en los que ha hecho hincapié la alcaldesa han sido los compromisos adquiridos con la administración concursal de la Empresa Municipal de Gestión Inmobiliaria de Alcorcón (Emgiasa) para abordar el “rescate” del Plan Permuta, y “recuperar así el patrimonio de Emgiasa”.

Esto permitirá la compraventa en bloque de las viviendas incluidas dentro de este plan que data de 2011 y que permitió a muchos mayores y “personas con movilidad reducida” intercambiar su piso por otro adaptado, y que, tras el acuerdo con la administración concursal, se mantendría como se acordó en un principio.

Finalmente, según ha resaltado De Andrés, a todo esto, se suma la aprobación de unos presupuestos “transparentes y adaptados a la realidad, después de cuatro años de prórrogas sucesiva”.