Once nuevas localidades se unen a la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España

La Asociación de los Pueblos más bonitos de España incorporará a partir del 1 de enero de 2019 a 11 nuevas localidades que han cumplido con los requisitos que establece la organización para formar parte de la red, que se inicia con la petición del pleno municipal o junta de gobierno, y que este año han solicitado numerosos municipios. Las nuevas localidades fueron anunciadas en la asamblea nacional que se ha celebrado en Candelario – La Alberca (Salamanca).

Bonilla de la Sierra (Ávila), Níjar (Almería), Roda de Isábena (Huesca), Bagergue (Lérida), Potes (Cantabria), Tazones (Asturias), Carmona (Cantabria), San Martín de Trevejo (Cáceres), Viniegra de Arriba (La Rioja), Viniegra de Abajo (La Rioja) y Setenil de las Bodegas (Cádiz) son las once localidades que pasarán a engrosar la lista de los pueblos más bonitos de nuestro país. Estos nuevos pueblos se unirán a las 68 localidades que ya forman parte de la Asociación y trabajarán conjuntamente para dar a conocer la belleza excepcional de los rincones españoles.

Hoy es un día de fiesta en muchas regiones de España, once nuevos municipios reciben el premio a toda una vida de cuidado, amor y buen trabajo realizado por parte de sus vecinos e instituciones, en muchos casos por varias generaciones, que supieron dejar un legado que se ha ido recogiendo con amor por sus descendientes. Un día de orgullo, pero también un día con una gran responsabilidad para el futuro. Estos once nuevos pueblos se han comprometido a mantener y mejorar día a día, su belleza arquitectónica, su patrimonio cultural, sus tradiciones y su entorno natural”, ha afirmado Francisco Mestre, Presidente de la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España.

Bonilla de la Sierra (Ávila)

Este pequeño pueblo del Valle del Corneja es, sin duda, una de las joyas de la provincia de Ávila. La villa de Bonilla de la Sierra presume de historia, patrimonio y naturaleza a partes iguales, fue durante siglos el lugar descanso de reyes y obispos. De ahí su carácter de villa episcopal y el rico patrimonio que conserva en pleno siglo XXI.

La localidad estuvo en su día cerrada por una muralla de algo más de un kilómetro de diámetro, de la que quedan restos, como la Puerta de Piedrahíta, aunque en su día hubo cuatro accesos.

Por cualquiera de sus calles principales se alcanza la preciosa plaza porticada del pueblo, con la iglesia-colegiata de San Martín de Tours, una auténtica joya en este bello municipio.

 

Níjar (Almería)

El bello municipio de Níjar presenta un conjunto urbano de gran atractivo, por su conservada estructura de origen árabe, laberíntica y estrecha, por la blancura de sus casas, por su iglesia mudéjar, por su artesanía, por la amabilidad de sus gentes.

El municipio se encuentra en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, primer espacio protegido andaluz terrestre-marítimo que comprende espacios y paisajes únicos: las únicas montañas de origen volcánico de la península; la franja costera con sus dunas, playas y salinas, verdadero espectáculo natural; y por último la milla de mar protegida cuyos fondos son de una gran riqueza.

A lo que hay que añadir los lugares y rincones de gran valor antropológico, como las Minas de Rodalquilar, el Pozo de los Frailes, el Cortijo del Fraile, San José, Las Negras, etc.

Roda de Isábena (Huesca)

El pequeño pueblo de Roda de Isábena, situado en la comarca de la Ribagorza, en Huesca y que con menos de 60 habitantes, presume con orgullo de ser el pueblo más pequeño de España con sede catedralicia. En este caso la catedral de San Vicente.

A parte de la catedral, Roda de Isábena es un encantador pueblo medieval con calles empedradas, sin tráfico, y con unas vistas desde el mirador de la hospedería o desde la puerta de Santa Ana que no dejan lugar a dudas de que este pueblo se construyó para vigilar el acceso al valle de Isábena.

La paz que envuelve Roda de Isábena y sus buenas gentes invitan a que nos acordaremos del pueblo por mucho tanto tiempo, tanto por su belleza como por los momentos vividos.

Bagergue (Lérida)

Este bello pueblo catalán es el municipio habitado más alto del valle del Alto Aran, situado a 1490m de altitud y forma parte del Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña.

Destaca el interesante museo Eth Corrau, que alberga más de 2500 piezas que muestran la vida cotidiana y la artesanía más rústica aranesa. Destaca también la iglesia parroquial de Sant Feliu del siglo XIII, aunque modificada en el XVI. A un kilómetro hacia el norte, siguiendo el río, merece la pena conocer la ermita de Santa Margarida de Bagergue.

Potes (Cantabria)

Ubicada en el centro de la comarca de Liébana, donde se unen los ríos Deva y Quiviesa, se encuentra rodeada de un espectacular paisaje y situada en la confluencia de los cuatro valles de la Comarca, la villa nos descubre a cada paso su rica historia.

Potes es conocida como la villa de los puentes y de las torres. De manera especial destacan la del Infantado y la de Orejón de la Lama, ambas del siglo XV. Conserva un gran sabor popular y mucho encanto; sus callejuelas y caserones blasonados ayudan al visitante a imaginar tiempos pasados repletos de historia.

Sin duda uno de los aspectos más relevantes de Potes y de toda la comarca es el gastronómico. La villa cuenta con un buen número de restaurantes de todos los estilos y categorías en los que se puede degustar gran variedad de platos. El cocido lebaniego es una de sus estrellas culinarias, a base de los garbanzos típicos de la zona, cecina o carne, berza y relleno.

Tazones (Asturias)

Es el único puerto asturiano con carácter imperial y es que este coqueto y pequeño puerto ubicado en las inmediaciones de la ría de Villaviciosa fue lo primero que conoció el emperador Carlos V en su primer viaje a la Península.

Tazones sigue siendo hoy aquel recóndito y amable pueblo que cautivó el corazón de un joven emperador. Sus barrios de antiguos casitas de pescadores, coloristas y con aromas de mar, sus rincones tan singulares como el de la casa de las conchas, sus animados restaurantes y terrazas que ofrecen exquisitos manjares del Cantábrico, su animado ambiente, hacen de esta villa marinera un lugar único al que siempre deseas volver.

Tazones guarda la esencia de la aldea asturiana, pero en este caso de una aldea peculiar, con hórreos, pero abierta al mar y que nos invita a descubrir lo bellos rincones de este municipio.

Carmona (Cantabria)

Su encanto, su cuidada arquitectura típica de la zona, su entorno y tranquilidad, hacen de Carmona un bello municipio cántabro, auténtico e ideal para la desconexión y los amantes de la naturaleza.

Declarado Conjunto Histórico-Artístico, mantiene intactos vestigios de su pasado, y aún se pueden contemplar en sus calles oficios como la ganadería y la artesanía. Espacios donde se respira esa calma, esa paz que lo hace más especial, donde solo nos acompaña el sonido de nuestros pasos sobre el suelo empedrado y el de los propios habitantes del pueblo, deseando conocer a los visitantes a este bello municipio.

Mención especial es el Palacio de los Díaz Cossio y Mier, del siglo XVIII y actualmente Parador de Turismo. Entre las festividades destaca la tradicional Pasá. En ella se celebra la bajada del ganado tudanco de los puertos de montaña de Sejos, a donde subió en época estival. El ganado desfila por el pueblo con decorados en sus cabezas. También se realizan otro tipo de actividades y eventos folclóricos y gastronómicos. Esta fiesta se celebra el último sábado de septiembre.

San Martín de Trevejo (Cáceres)

Enclavado en la Sierra de Gata, haciendo frontera con Salamanca y Portugal ha estado aislada durante muchos años, situación que le ha proporcionado un estilo propio en su arquitectura y que conserve un dialecto propio, A Fala, declarado Bien de Interés Cultural.

La lengua, una mezcla de vocablos galaico-portugueses ha seguido vigente hasta nuestros días gracias al aislamiento que este rincón serragatino ha tenido a lo largo de su historia. Está presente en todos los ámbitos y lugares: en los nombres de las calles, en los carteles de las tiendas y, principalmente, en las conversaciones de los lugareños, así que no se extrañe el visitante castellanoparlante si en su visita encuentra términos difícilmente descifrables.

Se trata de un bello municipio que recibe con los brazos abiertos a los viajeros que buscan relajarse completamente con su paisaje y la conversación con sus gentes; disfrutar de los platos típicos de la localidad y recorrer el rico patrimonio paisajístico a lo largo de sus rutas.

Viniegra de Arriba (La Rioja)

Viniegra de Arriba es el municipio de mayor altitud de las Siete Villas y el segundo de La Rioja con 1182m. Enclave natural privilegiado que se sitúa en el ángulo suroeste de La Rioja, limítrofe con Soria y que forma parte del espacio protegido “Sierras de la Demanda, Urbión, Cebollera y Cameros”.

En su casco histórico existen bellas construcciones que datan del siglo XVII y que responden a los cánones constructivos típicos de los pueblos serranos. No sólo la piedra de las casas es característica del pueblo, también las calles presentan un cuidado y estético empedrado que armoniza con los edificios. Entre los edificios que componen el conjunto brilla el Ayuntamiento construido en sillarejo y que cuenta con una original torre con reloj. Otros puntos característicos son su fuente de los tres caños, su zona de corrales en lo alto del pueblo, la iglesia parroquial de la Asunción y la Ermita de la Magdalena.

La zona cuenta con una destacada riqueza forestal, con especial presencia los bosques de haya y de roble. Pero sin duda el árbol característico de Viniegra de Arriba es el nogal, cuya presencia es tan destacada que dio el apodo de “noguerones” a sus vecinos. En el tema de fauna mencionamos al jabalí y al ciervo principalmente. El municipio es y fue eminentemente ganadero.

Viniegra de Abajo (La Rioja)

Atravesado por el río Urbión, entre una extensa y variada foresta, y a casi 1.000 metros de altitud, se ubica Viniegra de Abajo.

Trashumancia y viveza conviven en esta villa riojana de tradición ganadera, que tiene en la naturaleza y en la agricultura sus principales señas de identidad. Pero no son las únicas, basta con ver el monumento al Sagrado Corazón de Jesús, en lo alto del monte Turza, la espectacular iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, que data del siglo XVI, o la histórica ermita de la Soledad, para comprobarlo.

Entre sus festividades destaca la fiesta de las piraguas, el primer fin de semana del mayo, y sobre todo, las fiestas de Santiago.

Setenil de las Bodegas (Cádiz)

La singularidad y extrema belleza de su entramado urbano convierten a Setenil en uno de los municipios más bellos de la Sierra de Cádiz. Las casas, unas bajo la roca y otras sobre ésta o en su interior, imprimen diferentes niveles de altura a las calles, configurándose rincones tan especiales como las calles de la Cuevas de la Sombra y de las Cuevas del Sol.

Su localización actual es de origen medieval y en el espacio que hoy se denomina la Villa se asentaba el antiguo poblado almohade.

El castillo que domina el pueblo es una fortaleza de origen medieval (ss. XIV y XV), que conserva la Torre del Homenaje y un aljibe. Su patrimonio se completa con la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación; la antigua Casa Consistorial y las ermitas de Nuestra Señora del Carmen y San Sebastián.

Presentación resultados 2018 y nuevas actividades para 2019

Los municipios que se suman a la red se han dado a conocer en la asamblea nacional que se ha celebrado en Candelario – La Alberca (Salamanca), donde también se presentaron las conclusiones de la II Jornada “Turismo, innovación y medio ambiente en la España rural”, realizada recientemente en el Palacio del Senado y se mostraron todas las novedades para este 2019, como la III edición de la Noche Romántica