Hace pocas fechas el alcalde de Boadilla del Monte, anunciaba que “Ya hay 280 abonados en el servicio de bicicletas eléctricas…” en poco tiempo se está consiguiendo que una parte de los vecinos del municipio prueben este sistema de transporte alternativo dentro del municipio, tanto es así que según análisis internos de “Boadillaymas” porcentualmente hay mayor número de usuarios del servicio de bicicletas compartidas en Boadilla del Monte que en Madrid, donde ya lleva varios años implantado.
Aunque el Partido Socialista del municipio le parecen aún unos números escasos, y los reduce a un 0,56% de los habitantes del municipio, donde incluyen a recién nacidos, menores de edad y vecinos con movilidad reducida, lo cierto es que otros grandes municipios mantienen tasas similares en sus primeros meses de implantación, y otros no han terminado de despegar, como en el caso de la ciudad de Madrid.
En la capital, los abonos por el servicio de alquiler por horas de bicicletas, informaban desde el Ayuntamiento de Madrid y la EMT, representan un 0,54% de la población, pero si añadimos a los turistas que actualmente representan un porcentaje elevado de su uso diario, estaremos en cifras inferiores al 0,50%, más de seis puntos menos que los datos del municipio de Boadilla del Monte.
Lo importante según los informes internacionales sobre el uso de las bicicletas compartidas en los grandes municipios europeos es el aumento en el uso del servicio, en el número de viajes diarios y no tanto el % de abonos emitidos, y que cada uno de esos servicios representa en un municipio residencial como en el de Boadilla del Monte, dejar aparcado el coche, con los beneficios directos para el usuario y la comunidad.