Se inician las obras para transformar la marquesina histórica de Atocha

Las obras que cambiarán la estación de Atocha y sus accesos se han iniciado esta semana y mientras duren el aparcamiento P4 permanecerá cerrado.

Además de la entrada en vigor del 60% de descuento en el abono transporte, el arranque de febrero trae consigo otra noticia relacionada con el transporte en Madrid: el comienzo de las obras de la estación de Puerta de Atocha para la remodelación de su marquesina histórica y sus accesos, con una inversión de más de 56 millones de euros y una duración de 36 meses (3 años). Según ha informado el Administrador de Infraestructuras de Alta Velocidad (Adif), el objetivo principal de los trabajos es poner en valor la estación “como referencia del eje cultural Recoletos-Prado-Rondas, mientras mejora la accesibilidad desde el exterior y avanza en otras fases de su transformación”.

Durante el tiempo que duren los trabajos y a pesar de su complejidad, señala Adif, la estación de Puerta de Atocha-Almudena Grandes seguirá estando operativa. Sin embargo, las obras supondrán el cierre del aparcamiento P4 (manteniendo los servicios de taxi y carga y descarga) y cambios en los accesos peatonales a la estación, “que serán convenientemente señalizados”.

Con motivo del cierre del aparcamiento a partir del 1 de febrero, Adif se encargará de la construcción de uno nuevo “para dar respuesta a las necesidades de parking de la zona durante las obras de ampliación de la estación” con un coste de 23,5 millones de euros. Este aparcamiento será “provisional, desmontable y reutilizable” y permitirá ampliar temporalmente la capacidad del aparcamiento P3, pasando de 931 a 1.357 plazas.

¿QUÉ CAMBIOS SUFRIRÁ ATOCHA CON LAS OBRAS?

La remodelación de la marquesina histórica de Atocha supondrá ganar más espacio para los viajeros y permitirá habilitar nuevas áreas comerciales. También se intervendrá el Jardín Tropical y se sustituirán las carpinterías tanto interior como exterior.

En el exterior, precisamente, se adaptarán las dos plazas laterales (plaza del Embarcadero y patio de Méndez Álvaro) “a la configuración de la marquesina histórica y se habilitarán nuevos espacios”. Esa marquesina se convertirá en el acceso prioritario de la estación en el marco del Paisaje de la Luz, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO.

La plaza se organizará en torno a dos escalinatas, permitiendo así el acceso directo a la marquesina desde los dos pasos del entorno. Por una parte, el paso norte, que comunica con el eje Prado-Recoletos (acera Museo del Prado y Jardín Botánico) y el parque del Retiro. Por otra parte, el paso noroeste, comunica con el eje Prado-Recolectos (acera Caixaforum), las calles Santa Isabel y Atocha, el Museo Reina Sofía y las Rondas.

De momento, en su fase inicial, las obras de Atocha se concentrarán en la plaza del Embarcadero, “para recuperar el espacio del antiguo apeadero de Cercanías ubicado bajo la plaza”, según ha señalado Adif en un comunicado.

DÉCADAS DE HISTORIAS CONVIVIRÁN EN CHAMARTÍN

El nombre del proyecto de remodelación es “Chamartín ecosistema abierto”, y es una propuesta presentada por Esteyco, UNStudio y b720 Arquitectura. Ha sido elegida de entre 9 finalistas por unanimidad del jurado, que ha valorado aspectos como «la funcionalidad, la viabilidad constructiva, la accesibilidad e integración en la ciudad, la sostenibilidad, la arquitectura de género y la imagen», según ha detallado el organismo.

Además de lo anterior, uno de los aspectos que destaca Adif del proyecto es que “realiza de forma sobresaliente la conexión intermodal con el intercambiador, con acceso por Agustín de Foxá”. Esto permite integrar otros modos de movilidad (peatones, bicicleta, patinete…) y de transporte como el taxi o el metro.

Una vez que esté construido ese nuevo intercambiador, en Chamartín convivirán décadas de historia del transporte madrileño: la gran estación “futurista” y los trenes históricos de Metro de la Estación de Chamartín (calle de Agustín de Foxá s/n).