Así se recupera la calle Toledo de los daños de la gravísima explosión

La calle Toledo se recupera poco a poco de la explosión del pasado miércoles. Dos robots especializados en retirar forjados, vigas y pilares trabajarán durante dos semanas en la zona para paliar los daños provocados por la fuga de gas.

Los técnicos de Control de Edificación del Ayuntamiento están inspeccionando los edificios colindantes, desescombrando las cubiertas y creando pasarelas seguras para que los inquilinos puedan acceder a las viviendas.

Los técnicos han determinado que los edificios anexos no corren el peligro de inestabilidad, por lo que no serán derruidos. Otra suerte ha corrido el muro medianero, la cubierta y parte de la fachada que tendrán que rehacerse. El edificio más dañado ha sido el número 102 de la calle Toledo. El inmueble del número 106 ha vuelto a abrir algunas casas y que en el 104 podrán volver todos los vecinos cuando terminen de revisar todas las viviendas

La iglesia de la Paloma tiene pocos daños, solo algunos desperfectos en un ábside y en las vidrieras. El colegio de la Salle La Paloma apenas tiene desperfectos, salvo los cascotes caídos en el patio aún con nieve.

También existen unos contenedores colgados con grandes grúas, que irán trabajando lo largo del día, pero con mayor o menor ritmo dependiendo de cómo sople el viento. Según ha informado el alcalde de Madrid, ayer se quitaron escombros de la última planta y cubierta de la residencias de mayores.

Begoña Villacís se reúne con las familias afectadas por la explosión

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, se ha reunido hoy con las 14 familias realojadas por el SAMUR Social en el Hotel NH Madrid Ribera del Manzanares tras la explosión en la calle Toledo el pasado miércoles. La vicealcaldesa ha estado acompañada del delegado de Igualdad, Familias y Bienestar Social, Pepe Aniorte y el concejal del distrito de Centro, José Fernández.

En relación con cuando los vecinos podrán acceder a sus domicilios, Villacís ha asegurado que hay que “ser cautos con las expectativas que ofrecemos a los inquilinos porque, además, hoy es un día muy ventoso y lo que más nos importa es que el entorno sea totalmente seguro. Seguramente entre hoy y mañana la mayor parte de ellos podrán acceder a sus viviendas con las pasarelas que estamos instalando.”

Además, el Ayuntamiento de Madrid está prestando asistencia psicológica individualizada a los vecinos desalojados y afectados por este terrible suceso.

El hermano del sacerdote fallecido pide que “no se permita dudar del amor de Dios”

El hermano del sacerdote Rubén Pérez Ayala, uno de los cuatro fallecidos en la trágica explosión, presidió este jueves en la parroquia Santa Catalina Labouré una Misa funeral por él y por David Santos, feligrés de la parroquia también fallecido. Su hermano ha pedido que esto “no permita dudar del amor de Dios”.

Antes de comenzar la celebración, y ante los féretros de los difuntos, el arzobispo de Madrid, el cardenal Carlos Osoro, ofreció un responso. El féretro de Rubén estaba recubierto con su casulla y su estola, y con su Biblia, que fue rescatada de entre los cascotes, según informa el Arzobispado de Madrid.

“¿Es Dios un monstruo?”, planteó el catequista de David y Rubén, Cristóbal Arjona, en la monición de entrada. “¿Esto tiene sentido? ¿Es posible el consuelo?”, se preguntó, para añadir que la respuesta es la Resurrección de Cristo.

Por su parte, el celebrante aseguró que Rubén y David fueron dos hermanos de comunidad “que han partido juntos” y que ya en este mundo estaban unidos por una “amistad verdadera, fundada en Jesucristo”.

Además puso como ejemplo de fe y confianza a los niños explicando que las hijas del feligrés fallecido decían este jueves que su padre las va “a cuidar desde el cielo”, y que uno de los sobrinos había preguntado si “el tío Rubén se ha llevado el teléfono al cielo”. Seguro que si.

Tras la Misa funeral, los entierros serán este viernes en intimidad familiar. En los próximos días, se darán los detalles del funeral diocesano que será presidido por el arzobispo de Madrid Carlos Osoro.