La ruta de las patatas bravas en Madrid

Las patatas bravas son las reinas del tapeo, coronando la inmensa mayoría de barras. En la ciudad de Madrid, especialmente, se han convertido en ese bocado cultural al que rendir tributo en los bares y restaurantes. 

Las puedes encontrar clásicas o algo más transgresoras, pero para que sean ‘bravas’ deben ir acompañadas obligatoria y exclusivamente de la salsa que les da nombre.

En la capital madrileña hay verdaderos maestros de la salsa brava, al igual que existen absolutos despropósitos compuestos de tomate o tabasco. Y pocas cosas decepcionan tanto como unas pésimas patatas bravas. 

No hace falta decir que de nada sirve una excelente salsa si la patata no es de buena calidad. Lo ideal es cortarla en dados, que esté crujiente por fuera, cremosa por dentro y no vaya chorreando aceite. 

Y dicho todo esto, aquí os dejamos una lista con las patatas bravas madrileñas que no te defraudarán. ¡Saldrás más contento que unas castañuelas!

Las Bravas

La ruta de las patatas bravas en Madrid
La ruta de las patatas bravas en Madrid

Las Bravas -como bien te puedes imaginar por su nombre- no solo es especialista en elaborar esta tapa, sino que además es el bar de bravas más famoso de Madrid.

Ostentan el título de pioneros y el de tener un éxito duradero en el tiempo. Su misión cuando comenzaron no era nada sencilla, ya que este bar está enfocado especialmente en esta deliciosa salsa.

Y lo hacen combinándola con tortilla, oreja, pulpo y, por supuesto, las famosas patatas. Estas son bastante grandes, algo toscas y muy blanditas, así que mejor no vayas pensando en patatas crujientes y cremosas por dentro. 

La salsa brava es picante pero en su justa medida, y también se puede comprar embotellada para llevar a casa. Eso sí, no preguntes la receta, porque es ultra secreta.

Tienen dos locales abiertos en Madrid: uno en la calle Álvarez Gato 3, entre Sol y Antón Martín; y otro en la calle Pasaje Mathéu 5, al lado de Sol.