El auge de los apartamentos turísticos en Madrid, que comenzó hace más de una década, ha traído consigo diversos retos para la capital española. Sobre todo ahora, que se ha descubierto la actividad ilegal de gran parte de estos pisos turísticos, donde aproximadamente el 40% no cuenta con licencia.
Inicialmente concentrado en el Centro, que alberga alrededor del 50% de la oferta total de la ciudad, el fenómeno de los pisos turísticos se ha extendido a distritos periféricos. Sin embargo, la actividad ilegal de estos alojamientos ha generado preocupaciones sobre el alza de los precios del alquiler tradicional, la competencia desleal para el sector hotelero y las molestias para los residentes.
En el último informe de gestión de la Agencia de Actividades, se revela que las denuncias a pisos turísticos en Madrid han experimentado un aumento del 70.92% en los últimos doce meses. Las cifras pasaron de 282 denuncias entre enero y septiembre de 2022 a 482 en el mismo período de 2023. De estos informes, casi la mitad (410) son quejas vecinales, marcando un incremento del 68% en comparación con el año anterior. Las 72 restantes provienen de la Policía Municipal, Medio Ambiente y las juntas de distrito, representando un aumento del 89%.
ACCIONES DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID FRENTE A LOS PISOS TURÍSTICOS: NORMATIVAS EN DESARROLLO
El alcalde José Luis Martínez-Almeida, después de ganar las elecciones municipales con mayoría absoluta en mayo, ha puesto manos a la obra para abordar la problemática de los apartamentos turísticos. Traspasó los poderes relacionados con esta cuestión a su hombre de confianza, el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante. Una de las primeras misiones asignadas a Carabante fue la modificación de las normas urbanísticas relacionadas con estos alojamientos.
Recientemente, Almeida anunció la redacción de una legislación «más eficaz» en los próximos meses, superando la normativa aprobada por la administración anterior en 2019. «Los ejes centrales de la nueva normativa serán el descanso y el bienestar vecinal», explicaba el alcalde. Carabante detalló que se encuentran en la fase de análisis de la situación actual en la ciudad, evaluando el porcentaje de viviendas turísticas en cada distrito y determinando cuáles cuentan con licencia.
DESDE EL AYUNTAMIENTO ‘TIRAN VALORES FUERA’ Y SIGUEN BUSCANDO UN DIAGNÓSTICO
El proceso de evaluación implica un «diagnóstico» por parte de los servicios técnicos del Ayuntamiento. Además, se ha constituido un grupo de trabajo que involucra a distintas áreas como Turismo, Seguridad y Medio Ambiente. El objetivo es configurar medidas efectivas para abordar el problema de los apartamentos turísticos no regulados.
Ante la falta de control, varias asociaciones vecinales han unido fuerzas para crear la Oficina de Información Vecinal de Afectados por las Viviendas de Uso Turístico (VUT)
Almeida ha destacado que la normativa actual «no es suficiente» y que se pretende establecer un escenario que permita regularizar los pisos sin licencia y definir el futuro urbanístico de Madrid. La hoja de ruta implica una cuidadosa revisión de la situación en cada distrito y la colaboración interdisciplinaria para diseñar medidas concretas. Básicamente, por el momento se han permitido que la regulación de estos pisos turísticos esté en el aire, rozando la ilegalidad en gran parte de ellos. Mientras tanto, los vecinos incrementan sus quejas.
LA FALTA DE INSPECTORES Y ACTUACIÓN SELECTIVA
Aunque existen requisitos legales para ofertar un inmueble de uso turístico, como una declaración responsable de la Comunidad de Madrid y una licencia municipal, las multas por incumplir estas normas pueden ascender hasta los 300.000 euros en casos graves. Sin embargo, algunos expertos señalan que la aplicación de la regulación es insuficiente.
Rita Maestre, líder de Más Madrid, afirma que la ciudad ya cuenta con una buena regulación, pero denuncia que Almeida ha recortado el servicio de inspección, convirtiendo la normativa en papel mojado. Azael Babiano, socio del despacho Duroa Abogados, sostiene que la proliferación de los pisos turísticos está bien regulada, pero la falta de voluntad política y la ausencia de inspecciones efectivas son los principales obstáculos.
MOVIMIENTO VECINAL Y LA OFICINA DE INFORMACIÓN VECINAL DE AFECTADOS POR LAS VUT
Ante la falta de control, varias asociaciones vecinales han unido fuerzas para crear la Oficina de Información Vecinal de Afectados por las Viviendas de Uso Turístico (VUT). Dirigida por Víctor Rey, esta oficina, establecida hace un mes, atiende a ciudadanos de diversos barrios, desde Salamanca hasta Puente de Vallecas. El objetivo es abordar los conflictos generados por los pisos turísticos ilegales y buscar soluciones más allá de las denuncias administrativas.
La lucha contra la proliferación de apartamentos turísticos no regulados en Madrid sigue siendo un desafío complejo, pero las acciones del Ayuntamiento para desarrollar nuevas normativas y la participación activa del movimiento vecinal pueden marcar un cambio significativo en el paisaje urbano y la calidad de vida de los residentes.
