Casi dos meses después de que se inaugurara el Hospital de Emergencias Isabel Zendal, ya se empiezan a ver las primeras deficiencias del gran proyecto de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP).
En la actualidad, el Hospital Zendal es el mayor ‘Centro Covid’ de toda la Comunidad de Madrid. Ahora mismo, este es el que más enfermos ingresados tiene de toda la región.
Las denuncias que sus pacientes han compartido en redes sociales han animado a Más Madrid a visitar las instalaciones del hospital. El objetivo es conocer de primera mano el estado en el que se encuentran los ingresados y profesionales que trabajan en el Zendal.
Las lamentables condiciones para los pacientes
Además de tener que cargar con el peso de estar luchando contra la infección por Covid-19, los pacientes tienen que hacer frente a las deficiencias de las instalaciones del Hospital Isabel Zendal.
Aunque la comida de los hospitales, en general, no suele ser ‘plato de buen gusto’, lo cierto es que la del Zendal cuenta con un ingrediente más: el moho. Uno de los pacientes ingresados mostró en redes sociales el menú que le había ofrecido y se podía ver un plato de guisantes en mal estado.
El nuevo hospital de pandemia no tiene cocina. Este servicio está externalizado y la empresa Eurest es la que se encarga del catering que reparte la comida entre los enfermos. El contrato firmado con esta empresa privada alcanza el valor de 1.160.847,77€ durante 6 meses.
Otras dos pacientes mostraron en un vídeo las mala higiene de los aseos del hospital. Uno de los mayores problemas es la falta de agua caliente, lo que no permite poder ducharse en condiciones saludables.
El diseño del Zendal tampoco permite que los pacientes allí hospitalizados tengan intimidad. Además, no cuenta con quirófanos para poder intervenir en caso de extrema gravedad. Aunque, sin duda alguna, el mayor problema son las condiciones laborales de los profesionales que allí trabajan.
Sanitarios ‘amenazados’ para trabajar en el Zendal
Varios sanitarios han denunciado que se les está trasladando de manera “forzosa” desde su puesto actual de trabajo al nuevo hospital. Los profesionales se quejan de que estas restructuraciones no tienen en cuenta “ni el lugar de residencia, ni la labor que desempeñaban”.
Uno de los sanitarios trasladados del Hospital de La Paz al nuevo Zendal cuenta que el problema es que “no se me va a poner un sustituto en mi antiguo centro, por lo que el puesto en el que yo estaba va a cerrar por falta de personal”.
También otro de los problemas es que se va a penalizar a todos aquellos que rechacen el traslado. La Consejería de Sanidad dio indicaciones para que no se contratase a ningún profesional que se nieguen a aceptar estas condiciones, de forma que quede constancia en la bolsa de empleo sanitario de la Comunidad de Madrid.
Los políticos, sin responsabilidades
150 millones de euros de presupuesto no han sido suficientes para conseguir un centro con la calidad suficiente para responder a las necesidades de los enfermos de Covid-19 que allí se encuentran.
Los responsables políticos se pasan la responsabilidad entre ellos y no dan solución a lo que allí pasa. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP) denuncia una “campaña de desprestigio contra un hospital público”.
Mientras, por su parte, director General de Infraestructuras Sanitarias de la Comunidad de Madrid, Alejo Miranda de Larra, se desmarca de esta línea y admite que existen “deficiencias que se están corrigiendo”.
Más Madrid visita las instalaciones del nuevo hospital
La visita de Más Madrid ha sido motivada por los problemas que atacan al polémico Hospital de Emergencias. El Grupo Parlamentario ha indicado que el Hospital Isabel Zendal se trata de “una apuesta política que drena de recursos y profesionales de hospitales públicos”.
Mónica García, líder regional de Más Madrid, ha acudido hoy acompañada del portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Pablo Gómez Perpiyà y la portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre.
García opina que Isabel Díaz Ayuso ha querido focalizar toda la pandemia en este hospital y que, esta decisión, es como “desvestir un santo para vestir a otro” con el agravante de que cuenta con “una deficiencia de 150 millones”.
Más Madrid defiende que el dinero que se ha invertido en la construcción de este centro “se podría haber empleado en contratar a más profesionales para evitar que Madrid hubiera llegado a la tercera ola”.
