El ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón ha anunciado recientemente que ha destinado a un centenar de operarios para despejar la nieve que cubre las calles y entradas de la ciudad. El municipio lleva desde el viernes pasado sufriendo los efectos de la borrasca Filomena, que alcanzó más de 30 centímetros de espesor de nieve, congelada por las bajas temperaturas de esta semana. La complicada situación en la ciudad ha hecho que el ayuntamiento, como parte de su Plan de Inclemencias Invernales, destine a estas personas para quitar la nieve y el hielo y conseguir que, poco a poco, Pozuelo vuelva a la normalidad.
Esta borrasca que inauguró el año 2021 ha provocado el mayor colapso y caos de la historia reciente de Pozuelo. Muchas de sus zonas han quedado prácticamente aislada o de muy difícil acceso ante la gran nevada que estuvo más de 24 horas sin parar. Ante este escenario, estos 100 operarios resultarán de gran ayuda, realizando tareas como la recogida de árboles rotos o caídos (una seria amenaza añadida para los peatones), tareas de limpieza de aceras para facilitar el paso y el tráfico y despeje general de calles de nieves y hielo para que los pozueleros y pozueleras puedan ir a cuidar a familiares dependientes, acudir a sus puestos de trabajo o utilizar los servicios médicos, ya que la ciudad, como el resto de la Comunidad, lleva parcialmente aislada desde el pasado sábado.
La situación en la Comunidad no es mucho mejor que en Pozuelo. Solo en la capital, a 13 kilómetros de Pozuelo, estos días estamos viviendo 30 caídas por hora, más de 250 autobuses sin servicio, 90 ambulancias y tráfico telefónico al llamar a los servicios sanitarios o de ayuda. Se trata de una situación delicada, que puede resultar una tragedia para muchas familias y ha supuesto un grave parón en la mayor parte de la Comunidad durante una semana entera, con las consecuencias que esto tiene para muchas personas y negocios y en medio de la tercera ola de coronavirus, que no consigue contenerse ni en Pozuelo ni en la Comunidad madrileña en general.
Poco a poco, los servicios de transporte en la ciudad van volviendo a su normalidad, aunque, siete días después de suspenderse la mayoría de las líneas, aún muchos están cortados o los recorridos se ven alterados, según informa el ayuntamiento en su red Twitter. El consistorio recuerda que todos los ciudadanos de Pozuelo podrán pasar a recoger sal a los puntos habilitados para ello, aunque algunos vecinos han manifestado por las redes haber acudido a los mismos y no haber podido disponer de sal para ayudar descongelar las calles.
