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Los alumnos de Boadilla sin móvil en los colegios públicos

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Los alumnos de Boadilla sin móvil en los colegios públicos

Los vecinos de Boadilla del Monte tendrán que ver como termina finalmente la investidura en la Asamblea de la Comunidad de Madrid, para saber si el acuerdo firmado entre PP y Cs obligará a retirar los dispositivos electrónicos de las mochilas de sus hijos.

Entre las 155 medidas distribuidas en 18 epígrafes, que han firmado ambos partidos, en educación el nuevo Gobierno se comprometería a prohibir el uso del móvil «en horario lectivo» en todos los colegios públicos de la Comunidad.

Algunos padres están preocupados por desconocer si esto afectará también al futuro uso de tabletas móviles, elementos que se eliminarían en el aprendizaje de sus hijos y que otros colegios concertados de la zona, utilizan habitualmente, una especie de educación a dos velocidades.

Recordemos que en 2017 el Ayuntamiento de Boadilla del Monte destinó 150.000 euros para que las Asociaciones de Madres y Padres de los cinco colegios públicos del municipio pudieran solicitar la subvención para cubrir los proyectos en los CEIP José Bergamín, Príncipe D. Felipe, Teresa Berganza, Ágora y Federico García Lorca.

La subvención contemplaba entre otras medidas el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación, con la incorporación de tablets en las aulas, elemento que ahora parece que se puede quedar en un espacio de tierra de nadie.

Aunque las tablets en muchas ocasiones inician la jornada lectiva bloqueadas para que el uso sea exclusivamente el docente, lo cierto es que los chavales ya saben las mil maneras que hay de evitarse estos bloqueos y utilizar sus aplicaciones favoritas de mensajes, juegos en red e incluso llamadas online, y siempre durante la jornada escolar.

Padres y alumnos de otros centros escolares de Boadilla del Monte, como el Eurocolegio Casvi, reconocen abiertamente la facilidad para saltarse las limitaciones y poder «hacer otras prácticas más atractivas para los alumnos» en mitad de una clase. Tanto es así, que muchos padres reniegan ya del uso de estos dispositivos móviles para el aprendizaje en los niveles de primaria y ESO.