La Comunidad de Madrid está trabajando en el borrador de su propuesta para realizar test en farmacias que se enfoca, principalmente, en tres ejes: el tipo de prueba más adecuada, los locales que serían aptos para acogerlos y la trazabilidad de los casos.
“En la línea de aumentar la capacidad diagnóstica y que se puedan hacer muchos más test, entendemos que nuestra red de farmacias son 2.800 en la región y muy bien distribuidas geográficamente”, ha expuesto el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, en una entrevista en ‘EsRadio’.
Así, ha profundizado en que a la hora de elegir que test sería el idóneo para desplegar esta estrategia, tendrían una “doble visión” de que sirviese para cribados o que un madrileño pudiera adquirirlo él mismo. “Para eso necesitaríamos la autorización de la Agencia Española del Medicamento”, ha indicado.
Ante las críticas del Consejo General de Enfermería (CGE), que considera que la estrategia creará nuevo focos de contagio, Escudero ha remarcado que la Unión Europea ha señalado como objetivo “aumentar la capacidad diagnóstica y formar a no sanitarios para hacer las pruebas”.
“Madrid esta semana hemos estado cerca de las 190.000 pruebas realizadas y nuestro objetivo es seguir creciendo y vamos a buscar todos los mecanismos posibles para aumentarlo”, ha remarcado el titular madrileño de Sanidad.
Esta misma mañana el viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero, ha asegurado que la próxima semana terminarán el informe solicitado con la propuesta solicitada por el Ministerio de Sanidad y se le enviará.
Por otro lado, al ser preguntado por si se levantarán determinadas restricciones en Navidad si se sigue bajando, ha indicado que la decisión deberá tomarse más adelante porque “condiciona mucho cómo se comporta la pandemia estos días”. “Hay que ser prudentes”, ha remarcado.
