Rosa Menéndez, la primera presidenta del CSIC, recibe el Premio Clara Campoamor

Rosa Menéndez, la primera mujer en presidir el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), obtiene el premio Clara Campoamor del Ayuntamiento de Madrid.

La presidenta ha recibido el galardón por “el esfuerzo y el ejemplo demostrado a lo largo de su trayectoria“. Menéndez ha dedicado este premio a las mujeres de su familia, su madre y su abuela, “mujeres curtidas del campo astur” y a su hija, “que ha sabido coger el testigo” y a su hijo “por su reivindicativo posicionamiento en la igualdad de oportunidades”.

Rosa Menéndez es Doctora en Químicas por la Universidad de Oviedo y es experta en materiales de carbono para aplicaciones en energía y medioambiente. Se trata de una impresionante mujer con un amplia trayectoria que abarca más de 30 proyectos de investigación, de los que ha sido responsable de 23.

También es autora de más de 200 artículos en revistas internacionales. Sin duda, una carrera estelar que merecía de dicho reconocimiento feminista.

Rosa Menéndez y el CSIC

El Consejero Superior de Investigaciones Científicas no había tenido una presidenta mujer hasta que en 2017 Rosa Menéndez ocupó el cargo.

La asturiana lleva vinculada al CSIC desde 1979 y ha ocupado varios cargos de la institución. Rosa ha sido directora del Instituto Nacional del Carbón, gestora del Plan Nacional de Materiales y del Plan Nacional de Energía y entre 2008 y en 2009 ocupó el cargo de vicepresidenta del CSIC para finalmente acabar liderándolo.

Esta institución abarca 120 institutos de investigación con más de 1.500 proyectos en ejecución que colocan al centro como la séptima institución pública de investigación a nivel mundial.

Las instituciones municipales son feministas

El reconocimiento ha sido entregado por las instituciones municipales. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto a la vicealcaldesa, Begoña Villacís, y el delegado del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, han participado en el acto institucional así como del Consejo de la Mujer y los demás grupos municipales.

El alcalde se ha definido como un “feminista militante que busca la igualdad de derechos entre hombre y mujer”. Asimismo, el edil ha defendido la consecución de esta igualdad no solo desde el punto de vista legal y formal que proclama la Constitución y el ordenamiento jurídico, sino “sobre todo la igualdad material y de oportunidades que nos tiene que definir como sociedad”.

Por su parte, la vicealcaldesa ha destacado el papel de mujeres como las premiadas hoy por ser un referente para nuestras hijas, “para que vean el final del camino, porque luego ese camino es empedrado, pero es importante que las niñas puedan visibilizarlo y soñar y que sepan que a día de hoy los sueños se pueden lograr”.

Mención Honorífica al Club de Malasmadres

Por su parte, la mención honorífica ha sido para el Club de Malasmadres por su trabajo a favor de la conciliación desde la asociación Yo No Renuncio a favor de la conciliación de la vida familiar, laboral y personal.

Tal y como ha explicado su fundadora, Laura Baena, bajo el lema #YoNoRenuncio, esta asociación tiene como objetivo convertirse en el altavoz de las madres que tienen dificultades para conciliar, fomentar la concienciación social y contribuir al camino hacia la igualdad entre mujeres y hombres:

Tenemos que romper techos de cristal, tenemos que dar la mano a las que están abajo, tenemos que estar unidas porque el 8M es símbolo de igualdad y feminismo que nos une a todas y no podemos dejarnos llevar por lo que nos diferencia, porque lo que nos une es mucho más fuerte y nos hará volar lejos

Laura Baena, fundadora de Malasmadres

Asimismo, la Asociación Yo No Renuncio reivindica desde 2015 un Pacto de Estado por la Conciliación que aglutine a partidos, empresas y familias. Porque la trayectoria profesional de las mujeres no debería verse ralentiza, e incluso, en el peor de los casos, paralizada por el hecho de dar a luz.