Laura Aznar de Vargas, estudiante de 2º de Bachillerato en Boadilla del Monte, y perteneciente al Club de Esgrima “Sala de Armas de Madrid” (SAMA) arranca 2021 con un tercer puesto en la 1a fase territorial absoluta de espada femenina, en la que han competido 34 tiradoras, en el municipio de Rivas-Vaciamadrid.
Con solo 12 años, unos ojos limpios, una sonrisa honesta, y mucha velocidad en sus muñecas, arrancó una afición que cada año le produce más alegrías, llegando solo tres años después a alzarse en 2018 con un 5º puesto en la copa de Europa, en la categoría de espada.
Como integrante del equipo español de esgrima femenina, Laura sueña con poder competir de forma regular en los campeonatos internacionales y han puesto en marcha el “Proyecto Impulsa” con la meta puesta en conseguir patrocinadores para impulsar el nivel técnico y de rendimiento deportivo en las chicas del proyecto.
Para Laura Aznar, la reciente llegada del madrileño José Luis Abajo -Pirri-, a la presidencia de la Federación Española de Esgrima, ha sido una muy buena noticia para el deporte de base, “un medallista olímpico que conoce las carencias que tiene un deporte tan minoritario como la esgrima, y que se mueve con mucha soltura entre los medios, es una gran oportunidad para poner en valor este bello deporte y que deje de ser un deporte desconocido en nuestro país”.
2020 ha sido un año muy complicado para todos los deportistas, en el que muchas competiciones no se han podido celebrar a raíz de la pandemia del coronavirus, un año que Laura lo define como “de transición, y que ahora, tras la parada por el confinamiento, nos permite volver a recuperar sensaciones, volver a enganchar el ritmo de competición tan importante para todas nosotras, un año donde todo se ha parado menos los motivos que la impulsaron a elegir este deporte olímpico que defiende los valores del esfuerzo, la generación y elección de estrategias, la disciplina, la velocidad, el equilibrio y la coordinación.
Laura Aznar ha destacado durante los últimos años en todas sus participaciones, mostrando lo que para muchos es ya una carrera prometedora, como en los Campeonatos de España Cadete y Junior individual en 2019 en Valencia y Galapagar, donde acabó subcampeona, y esta última prueba confirma su buen estado de forma, que entrena bajo la batuta del técnico Hugo Díaz-Regañón.
En diciembre de 2020, durante el campeonato de España Junior quedó en séptima posición en categoría individual y cuarta por equipos, y decidió competir durante el mismo fin de semana en categoría absoluta, quedando entre las 20 primeras, tirando contra grandes esgrimistas y venciendo a la campeona del mundo de esgrima en el 94, Cristina de Vargas, su madre.
En los próximos meses acudirá al Torneo Nacional Junior en Medina del Campo y un Absoluto Nacional en Valladolid, seguirá acudiendo a formarse fuera de España si la alerta sanitaria lo permite y seguirá trabajando para traer medallas internacionales, y lo único que pide “es más apoyo desde las empresas y desde las instituciones para que la esgrima femenina española pueda superar todas sus metas”
